Puesto que es domingo.......a pecar escribiendo.
Acabo de leer la lista de los cabeza de idem de cada una de las provincias y me he quedado "pasmao", pero tranquilos, que solo me voy a fijar en dos de ellas. Navarra y Sevilla.
En Navarra no se si la suerte, el apellido, el manejo de conocimientos y proximidades profesionales de papi han hecho que un chiquito que consiguió estar esta legislatura pasada de diputado, luego diré como, encabece la lista del PSN, partido que se ha distinguido por tener personalidad propia y que no ha tenido reparo alguno en confrontar democráticamente con Ferraz y por esto ser laminado.
Don Juanito Moscoso no sé si sigue siendo militante de la agrupación socialista de Chamberi, supongo que no, que en su momento se trasladaría a alguna del viejo reino de Navarra, pero después de unos diez años de militancia en Chamberí aseguro conocerle política y personalmente lo suficiente como para afirmar que sobre cualquier tema que se plantee es de los que siempre, siempre, se decantará por el no sabe/no contesta. Jamas le oí mantener opinión propia, jamas mantuvo idea personal alguna, jamas debatió con nadie, jamas se ocupó de tener identidad política alguna, pero siempre sonrió a todo el que él consideraba que tenía el mas mínimo poder, y hasta a mi, un simple secretario general de agrupación madrileña me aduló sin mas aparente razón que caerme simpático.
Y de eso va la cosa. Que los zapateristas solo quieren sonrisas, y no las sonrisas que nacen espontáneas de un acierto gracioso u ocurrencia intranscendente, no, estos quieren sonrisas complacientes con la estupidez, con la incompetencia, con el desconocimiento, con el abolengo, con el poder despótico, con la ignorancia y en todo esto, en sonreír y asentir, don Juan Moscoso es un aventajado alumno de su padre.
Por si alguien no lo sabe. Juan Moscoso llegó esta legislatura a la carrera de San Jeronimo siendo cuarto en la lista navarra después de "conseguir magicamente" que la lista corriera. Milagros navarros que solo el Opus ayuda a conseguir.
De otro lado lo de Sevilla no es para tomárselo como lo de Navarra, desde el ridículo y la estupidez y la imposición.
Lo de Sevilla me duele, ya que habiendo tenido siempre como referente político personal a Alfonso Guerra, no entiendo que hace, supongo que sin necesidad, que hace, en una lista zapateril.
Tiene Alfonso, al contrario que el niño Moscoso, recorrido, identidad, personalidad, entrega, trabajo, y firmeza demostrada, como para que este humilde ciudadano que ha seguido sus enseñanzas desde hace treinta años, hoy se vea confundido por una actitud cuya única explicación a la que me alcanzan, a bote pronto, mis neuronas es que la edad y la comodidad también tienen su peso. Pero me gustaría que hubiese otra explicación políticamente mas de recibo.
1 comentario:
Pues yo toito te lo consiento menos mentarme a Alfonso, te lavas la boca solo para decir su nombre.
Claro que va por la lista de Sevilla porque es un hombre de PARTIDO con mayúsculas, porque sabe que el PSOE es mucho más grade que el más grande de sus militantes y que ninguno puede anteponer su orgullo personal o sus aspiraciones humanas por encima del Partido.
Arrima el hombro o vete al PP que allí serás bien recibido.
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