miércoles, 31 de marzo de 2010

LO QUE DICEN Y DIBUJAN OTROS

Como casi estamos de vacaciones y no tengo ganas de contar el último negocio del Sebastián, el de los 130.000 decodificadores “repartidos” gratuitamente, que el penúltimo, el de las bombillas que nadie ha visto, ya ha debido prescribir, adjunto les dedico otro acertado articulo de Juan Carlos Escudier publicado en “Público” (la redundancia es inevitable), así como la ilustración que lo acompaña salida del pincel de Alfons Lopez, y que estimo que el parecido de ambos trabajos con la realidad de la que disfrutamos es premeditada coincidencia.
LA IZQUIERDA SE HA MUERTO.- "
Sostiene Carrillo que es muy necesario otro partido a la izquierda del PSOE porque el PCE es el fósil de un trilobite e IU padece de anemia crónica. A esta nueva organización le correspondería recoger la tradición comunista y criticar al capitalismo de hoy que, en su opinión, es mucho peor que el de hace un siglo. A uno le cuesta asumir que la solución de la izquierda pase por la refundación en torno a un nuevo edificio donde buscarían piso los inquilinos de siempre, sin antes resolver su gran problema de fondo, que no es la marca sino la esencia. El problema de la izquierda es que se ha muerto y el deceso se ha silenciado, como la viuda que oculta el cadáver del marido para cobrar su pensión unos meses más.
Sólo el fallecimiento explicaría que, ante una crisis que ha conmovido los cimientos del capitalismo, la izquierda haya sido incapaz de elevarse sobre el caos para ofrecerse siquiera como posibilidad. No cabía esperar mucho de una izquierda oficial, que carece de pasado porque renegó de él, que se ha convencido de que no existe alternativa al libre mercado y que entiende que el progreso se circunscribe exclusivamente a reconocer a los homosexuales el derecho a contraer matrimonio. El drama es que la otra izquierda no perdió el tiempo a la hora de consumirse a sí misma, levantado banderas que ya nadie sigue o aprovechando un viaje en taxi para escindirse en grupos impares menores de tres.
El reto no es botar al océano de la política unas nueva siglas sino iniciar la resurrección, porque hasta Juan la Loca se cansó de pasear por los campos el féretro de su bello esposo. Y ello exige rescatar lo aprovechable del naufragio del comunismo, atraer de nuevo a los intelectuales, alumbrar ideas cuyo horizonte no sea el de la utopía irrealizable, construir un discurso económico que enfrentar al pensamiento único y desterrar un obrerismo caduco, ya que la semilla ha de germinar en una clase media que, aun explotada, se contempla a si misma como la burguesía del chalet adosado y la barbacoa.
No se trata de conservar el pasado sino de cumplir sus esperanzas. No basta con proclamar que algo es de izquierdas para que lo sea. La izquierda nace en la igualdad, se alimenta de la libertad individual y se expande con el conocimiento. Lo demás es un vudú insensato
".

lunes, 29 de marzo de 2010

LA RENTABILIDAD DEL NEGOCIO

No es necesario remarcar que antes de iniciar la aventura de una nueva empresa o negocio hay que conocer la mayoría de las particularidades que conlleva la actividad a emprender, y entre ellas la ratio de rentabilidad que empresas del mismo sector estén teniendo.
Así, todos hemos visto, y más últimamente, como no pocos comercios y empresas cesan en su actividad afectados por la crisis o por una mala estimación, previa al inicio de la actividad, de la relación entre ingresos y gastos, o una defectuosa valoración del hueco de mercado que se pretendía ocupar o mas simplemente, una mala ubicación geográfica respecto al mercado o clientela a atender.
En el otro extremo, vemos diariamente como con crisis o sin ella en este país nuestro hay dos actividades económicas contra las que la crisis se estrella sistemáticamente.
Su mejor ejemplo, los miles de bares que sean de copas o de tapas o de ambas a la vez se dan por todo el territorio nacional.
Es evidente y pocas cuentas hay que echar para concluir que raro es el bar que se cierra por falta de clientela, es decir, por falta de rentabilidad. Y como no es cuestión de frivolizar con estas cosas vaya por delante que considero que esa actividad económica es una de las mas sacrificadas que puede haber, ya que al considerable desembolso económico que hay que efectuar para la primera instalación, hay que sumar en incontable trabajo que diariamente hay que realizar para que los clientes ocasionales se conviertan en parroquianos y estos con su presencia aseguren un flujo de caja suficiente para mantener la rentabilidad del negocio. En todos estos casos aunque la rentabilidad sea abundante, el esfuerzo y la dedicación no son inferiores a ella.
La otra actividad económica destacadísima por su rentabilidad sin par y que en los no tan últimos tiempos está abundando más que las moscas en la mierda, (con perdón, pero viene como anillo al dedo), es la resultante de matrimoniar negocios y política.
No creo necesario recordar la ya larga lista de corruptos que tras haber trincado de lo público todo lo que a su mano quedaba, se han ido prácticamente de rositas o en el peor de los casos tras unos añitos en una especial, si no cómoda, cárcel, que para eso eran padres de la patria.
Los implicados en el caso Naseiro obtuvieron una rentabilidad infinita, ya que no expusieron nada, trabajaron menos y se lo llevaron crudo. La saga de corrupción institucionalizada en Marbella, es otro ejemplo de cómo se asalta lo público y como mucho, solo uno paga el pato. Para qué hablar de lo que Maragall denominó el partido del tres por ciento. O de Filesa, Malesa y Time Export, o sea de la financiación del Psoe.
Solo Roldan es por ahora ejemplo de antiguo político que ha pagado con cárcel el latrocinio que hundió al felipismo, aunque es necesario reconocer que según lo que cuentan, cada añito de talego le ha salido por más de doscientos mil euros, que no es mal sueldo.
Hoy, cuando un tal Matas está en la picota, cabe aventurar que, en el peor de los casos, a este ejemplar gestor del aznarismo, el año de cárcel no le sale por menos euros que a Roldan. Y todo por haber metido, no la mano en el presupuesto público de Baleares, sino la pata al haberse largado a los USA sin el visto bueno de quienes hoy le pudieran proteger lo mismo que están protegiendo a los Galeotes, a los Bárcenas, a los Camps, a la lideresa madrileña y sus Granados y “Chinos” González, con una única condición, a saber, que aun quedándose estos interfectos con la mayor parte, con los de arriba hayan repartido.
Es escandaloso que nadie se escandalice. Nadie tampoco reclama una reacción social adecuada a la degeneracion que nos imponen. Muy al contrario, pareciera que si tanto en un lado como en otro del espectro político español, la corrupción campa a sus anchas y la ciudadanía comprueba que su trabajo y esfuerzo es raquíticamente compensado con salarios menguantes y fiscalidad creciente, nadie aparenta preocuparse porque uno de los refranes más cínicos y desvergonzados pero especialmente certero, como el resto del refranero español, es aquel que cada vez se oye mas, “que no me den, que me pongan donde haya”.
Y como guinda del día vemos como al mismo tiempo que los franquistas judiciales anulan pruebas sustanciales de la corrupción aznarista, la llamada justicia española condena a unos trabajadores a dos años de cárcel por haber protestado de su situación laboral invadiendo una pista de un aeropuerto.
¡País!. Que decía antaño el Forges.

jueves, 25 de marzo de 2010

LA LEY DE HOOKE DE LA DERECHA

Todo el que haya estudiado física recordará con mayor o menor claridad la Ley de Hooke, también conocida como la ley de la elasticidad. Por ella sabemos, desde que en el siglo XVII Robert Hooke la desarrollase matemáticamente, que el alargamiento de un material elástico es directamente proporcional a la fuerza o carga aplicada, siempre que no se rebase su límite elástico, que es la tensión máxima que un material elástico puede soportar sin sufrir deformaciones permanentes, ya que si a ese material elástico se le aplicasen tensiones superiores a este límite, el material experimentaría deformaciones permanentes y no recuperaría su forma original al retirar las cargas.
Tras este revival puntual de mi bachillerato en tiempos de la dictadura, los que con más asiduidad me siguen habrán descubierto que, aunque no lo parezca, hoy, esto, también va de política.
Cuando tras casi tres años de crisis tenemos en este país alrededor de cinco millones de parados, los bancos presentan resultados y nos dicen que, después de guardar pudorosamente parte de sus beneficios, “solo” han ganado 15000 millones de euros, por lo que es “perfectamente entendible y disculpable” que sigan sin ejercer el papel para el cual se les concedió el tiquet bancario, financiar la actividad económica española.
Ante esta evidencia, no creo que pueda ser tachado de extremista si afirmo que la banca, aun financiando, cuando no regalando dinero, a los partidos políticos, no parece muy dispuesta a aportar soluciones a la crisis económica y social que este sistema de apariencia democracia está imponiendo a la mayor parte de la ciudadanía española. En pocas palabras, la crisis social es un efecto de su provechosa crisis económica, la cual les está facilitando el transito a otro sistema de relaciones económicas, laborales y políticas.
Al tiempo, y de forma nada casual, se puede afirmar que parece que la mayor parte de aquellos que desde la más altas instancias judiciales debieran impartir justicia, se han concitado para solo aplicar su dura ley a quienes han osado alterar la placidez del franquismo, tanto el histórico como el actual.
No puede ser casual que uno de sus integrantes, tan mal instructor de causas como egocéntrico juez, sea atacado por la extrema derecha franquista, la que políticamente está fuera del arco parlamentario y por la extrema derecha judicial, la que ha pervivido sin inquietud alguna desde antes de 1975. No puede ser casual que esa misma clase judicial eche por tierra todos y cada uno de los casos de corrupción que afectan a los suyos, y así, tanto el antiguo caso Naseiro como los derivados de la operación Malaya y Gürtell queden en simples anécdotas de cómo se pudre el sistema político español.
En otro ámbito, y descreído que soy de las casualidades, no hay que sorprenderse porque un fascista como Mayor Oreja se atreva a afirmar que los socialistas son potenciales socios de ETA, pero tampoco es motivo de sorpresa que el PP no solo no lo descalifique sino que lo apoye sin que se haya dado, hasta el momento, reacción alguna de los que son tenidos por el ofensor como socialistas.
Conclusión A: (más o menos científica) La derecha franquista española, -la única existente, ya que la democrática no pinta nada-, ha decidido aplicar una fuerza muy superior al límite elástico del zapaterismo, por lo que, atendiendo a lo establecido por el científico inglés, difícilmente podrá el PSOE recuperar su antigua identidad, identidad que ha sido deformada, primero por su debilidad conceptual y su connivencia con el adversario, y ahora, por la fortalecida y, cada día, más agresiva derecha.
Conclusión B: (más o menos obvia) Cuando el enemigo es débil, cede terreno y además se equivoca, es el mejor momento para rematarle. En eso están todas las derechas, enemigas del sistema y de cualquier alternativa que se les oponga, aunque esta sea tan inocua como para sus intereses es el zapaterismo.
Recordatorio final: En los noventa, cuando la fuerza de los gobiernos de Felipe González, disminuyó, apareció el brazo armado mediático del franquismo, el llamado “sindicato del crimen”, hoy, cuando el zapaterismo se rinde a las imposiciones del capital, no debiera extrañarnos que resucitasen el tribunal para la represión del bandidaje, el comunismo y la masonería, y el de orden público, el TOP.

martes, 23 de marzo de 2010

LA REBELDIA DESTRUCTIVA

Informa hoy “El País” sobre una intervención de Felipe González en la Universidad de Nueva York en la que ha mostrado su preocupación porque no se esté aprovechando la ocasión de la crisis para "poner un poco de orden que permita la reforma del funcionamiento del mercado financiero, que salve a la economía de mercado de implosiones sociales que en el futuro no serán contenibles como esta vez". En este sentido, ha afirmado que no puede confiarse en la "mano invisible" de soluciona todo por sí solo. "La próxima será una crisis de rebeldía destructiva".
Una vez más, con esta percepción de la realidad, se demuestra el abismo que separa a quien hasta la rancia derecha española reconoce como el mejor político que ha tenido España en el siglo pasado, de aquellos otros que, como los de ahora, solo saben dónde está su mano izquierda si esta percibe metálico alguno.
No anda descaminado González, cuando se teme que la próxima crisis sea de rebeldía destructiva, pero desde mi percepción personal estimo que pudiera estar pecando de optimismo, de ese optimismo antropológico que, quizás, le haya sido contagiado por el líder de la conjunción planetaria, y puesto que se siguen acumulando sobre las espaldas de los que menos tienen una insoportable cantidad de abusos, de mentiras y de injusticias como nunca antes en tan poco tiempo se dieron, no hay que descartar que esa “rebeldía destructiva”, que González atribuye a otra próxima crisis, se produzca en el inmediato futuro.
Cuando la ciudadanía comprueba cómo de la crisis provocada por el sistema financiero y por sus protegidos del ladrillo, son estos los que salen fortalecidos con la “protección” del Estado. Cuando ya la totalidad de los españoles han constatado como sus impuestos actuales y los futuros se han empeñado a favor de los que más tienen. Cuando agotadas las disponibilidades financieras del Estado se acude al sistema de protección social para obtener más fondos con los que seguir la discriminatoria acción financiadora que la clase política española otorga a los plutócratas. Cuando esa misma clase política se concierta en contra de las necesidades de los declarados como dependientes, quienes por primera vez iban a ser atendidos por la acción social del estado. Cuando sin contraprestación alguna se regala dinero público a quienes siguen generando la causa del mayor malestar social, el paro, que en todo el periodo de esta llamada democracia española, jamás, en tal cuantía se ha sufrido. Cuando todo lo anterior es de dominio público y de carácter irrefutable sea cual sea el posicionamiento político de cada ciudadano, hay que tener muy presente, y de ninguna manera descartar, que todo ese cúmulo de ataques al bienestar social acabe provocando la rebeldía ciudadana, esa rebeldía destructiva que se teme González sin que haya que esperar a otra beneficiosa crisis del sistema financiero y ladrillista español.
Mi mayor deseo es equivocarme, pero para que tal suceda y la explosión de rebeldía ciudadana no se dé, se debería cumplir un requisito que desde mi entender considero prácticamente imposible, que rectifique toda la clase política y sindical española y que la acción del estado se oriente a proteger a sus ciudadanos, especialmente a los más desfavorecidos y no a las mal llamadas instituciones financieras, causantes, con premio, de esta situación de injusticia social inaceptable. Pero me temo que va a ser que no.

martes, 16 de marzo de 2010

EL MUNDO AL REVES

A nadie se le oculta que lo de la rebelión de la lideresa Aguirre a cuento de la posible subida del IVA es solamente una pose populista y antigubernamental, ya que las subidas que ella ha aplicado a los transportes en Madrid dejan pequeña a la que sufriremos en julio por obra y gracia de Zp.
Pero aun siendo cierto lo anterior lo mas llamativo es que la totalidad de los opinadores y escribidores oficiales del zapaterismo se han lanzado con el mismo ímpetu a atacar a la lideresa rebelde como a defender la bondad de la subida fiscal.
Nadie de ese entorno zapaterista, -excepción hecha de Joaquín Leguina-, ha pronunciado silaba alguna en contra de la subida de un impuesto indirecto que afectará principal y casi exclusivamente a las economías domesticas medias y bajas, ya que por mucho que teoricen sobre cuanto incidirá tal subida fiscal en los precios, y sobre quienes sí y quienes no absorberían con cargo a sus cuentas de resultados el incremento del 12,5 % que supone pasar del 16 al 18 % en el tipo general, la realidad es que en todos aquellos productos básicos y de consumo ordinario, podemos tener por seguro que los tenderos, desde el del barrio al de la gran superficie, desde el chino de la esquina al Loewe más pijo, todos, repercutirán la subida a sus productos, y quizás algo más para así incrementar su tajada y culpar a este gobierno de inútiles que se disparan a su propio pie.
La resultante de todo este estúpido barullo es que la derecha mas agreste se ha lanzado contra el impuesto menos progresivo, (no confundir con progresista), mientras que la supuesta izquierda, en un nuevo ejercicio de cacareo travestido, mantiene que los ingresos del estado han de engordar por esta vía a fin de reducir el déficit publico y para que, consecuentemente, allá por las calendas grecas, el empleo repunte lentamente, si, no sé que dios quiere.
En esta absurda representación teatral, pues ficción y mentira es todo lo que nos cuentan, ni la derecha es consecuente con lo que dice y hace, ni la supuesta izquierda lo es con toda la historia de la que se reclaman herederos.
Menos mal que para deshacer este entuerto, tenemos en Madrid al líder de la izquierda más clásica, más reivindicativa, más tradicional, más obrerista y revolucionaria del mundo mundial. El secretario general del PSM, Tomás Gómez, se ha despachado con unas declaraciones en las que en contra de todos los planteamientos fiscales del zapaterismo, pretende que se establezca un nuevo impuesto a los bancos y cajas consistente en un tipo del 0,1 % sobre los recursos ajenos depositados en esas entidades, y como el chico no es tonto y le va cogiendo el tranquillo a eso de quienes son los que mandan, ha añadido la coletilla que ese impuesto sería de aplicación temporal, solo un ratito, no vaya a ser que se le enfaden los de Caja Madrid y no le coloquen.
En su descargo hay que tener en consideración que estas declaraciones las ha hecho un viernes por la tarde y, ya se sabe, el alcohol más coche es malo, pero alcohol mas política, peor.
Pero si el Tomás hubiese estado sobrio y aun así dijo lo que dijo, pudiera suceder que el fin de semana próximo, -puente de tres días completos para tener ocurrencias-, nos vuelva a sorprender proponiendo que es necesaria una reforma fiscal por la cual las rentas del capital tuvieran el mismo tratamiento que las del trabajo.
Pero no creo que llegue a tanto ya que el alcohol de 96 º, el de quemar, no se bebe.

lunes, 15 de marzo de 2010

NO SON LO MISMO…..¿O SI?

Siempre he mantenido que en todo colectivo, y más si es amplio como el de los militantes de un partido político, hay de todo. Gente maja, comprometida con sus valores, despegada de sus intereses, y entregada al ideal de la acción política como medio para avanzar hacia el bienestar social, en resumen buena gente. Y en el extremo opuesto gente sin escrúpulos, marxistas sector Groucho, que cambian de principios atendiendo a las posibles fluctuaciones de sus cuentas corrientes, gente, los más, que llegan a vivir de la política de forma casi indefinida con solo rendir constantes alabanzas a aquel que “dedocraticamente” los pone donde algo puedan reportarle.
Hemos tenido estos días una de las mas irrefutables pruebas de la desvergüenza que guía el actuar de muchos de los que en política se aposentan y deciden que cualquier actuación es buena si beneficios personales aporta
El caso de ese innombrable vicesecretario provincial orensano del PS de Galicia que, ni corto ni perezoso, a los pocos días de ser elegido para ese cargo en el correspondiente congreso, se ha visto deslumbrado por el “maravilloso” proyecto del cacique del PP orensano y en volatin político-circense pasa de la “socialdemocracia zapateriaza” a la cazurrería de los de la boina derechosa sin que se le mueva un pelo. Bien es cierto que si el desvergonzado se encontraba a gusto en el PSOE gallego, pues contaban con él y aun así, contento, satisfecho y deslumbrado se pasa, no se si con armas, pero seguro que con abundante y vacío bagaje a llenar, al PP, poca o ninguna diferencia debe haber hallado este saltimbanqui entre los dos partidos.
De otra parte, y abundando en los parecidos, - y nada de mera coincidencia-, si la actuación del PP valenciano respecto a la exposición de fotografías que les retrataban tal cual son, se ha calificado de vergonzosa censura política, ¿Cómo cabe calificar el veto del ministerio de Medio Ambiente, y etc, etc, a la emisión en TVE o la opción de podar unos minutos de un documental que documenta, (y perdón por la redundancia), la corrupción ladrillera en el litoral español.
A pesar de los pesares, yo sigo pensando que, para mal, España sigue siendo diferente, pero aun con alguna esperanza de que la situación cambie, tengo por cierto que Psoé y Pepé, hoy por hoy, son pero que muy parecidos.

viernes, 12 de marzo de 2010

¿CUAL ES EL PRINCIPAL PROBLEMA DE ESPAÑA?

Si un barómetro es un instrumento que sirve para medir la presión atmosférica, el barómetro del CIS es el medio de medir la presión social en un momento dado, y los datos que nos aporta el efectuado en el mes de febrero no dejan duda alguna acerca de los problemas mas importantes que soportan los españoles.
En primer lugar el paro, ya que con cinco millones de parados no es de extrañar que sea citado por el 63,3 % de los encuestados a los que en buena lógica habría que sumar el porcentaje de los que estiman que el principal problema que tenemos en España es de índole económica, y que casualmente ese porcentaje del 19,1 % viene a coincidir casi milimétricamente con la cifra de desempleo oficial. Por lo tanto, y aunque el CIS presente estos dos datos de forma disociada no es contradictorio ni acientífico asegurar que el 82,4 % de los españoles consideran que la crisis económica y su derivada del paro es el principal problema de este país. Apabullante dato pero lógico, normal y nada sorprendente. Lo sorprendente viene después.
El segundo problema, -si aceptamos la integración en uno de los dos anteriores-, que los españoles consideran como más importante es….la clase política y los partidos políticos. El 4,7 % de los encuestados así lo expresa. Pero al igual que en el primer caso, si se lee detenidamente el cuadro que refleja la opinión de los encuestados sobre cual es a su juicio el principal problema actual, veremos que hay una, - “quizás casual”-, trampa. Veamos.
Disociada de la cuantificación correspondiente a la respuesta anterior, la de aquellos ciudadanos que consideran que el principal problema de España es la clase política y los partidos políticos, encontramos unas líneas más abajo, -en el cuadro correspondiente a la pregunta nº 5 de respuesta espontánea-, que el 3 % de los encuestados consideran que ese principal problema es el gobierno y los partidos políticos, por lo que, de la misma forma que en el caso de las respuestas sobre el paro y la crisis, agregar estos dos grupos de respuestas está perfectamente justificado por su propia naturaleza y contenido.
Por todo ello cabe afirmar que el segundo gran problema de este país es la clase política, el gobierno y los partidos políticos ya que un 7,7 % de los ciudadanos así lo consideran.
Esto supone que hay tres veces más españoles que consideran que el mayor problema son los políticos que aquellos otros que estiman que el principal problema es la inmigración.
El ultimo dato que aquí reflejaré sin comentario alguno es que solo el 0,7 % de los encuestados entienden que el mayor problema que tiene España es el terrorismo y ETA. Son once veces más los españoles que consideran que es mas problemático para España el gobierno, la clase política y los partidos políticos que el terrorismo y ETA. Por algo será.

jueves, 11 de marzo de 2010

LO QUE DICEN OTROS....

Para quienes sigan dudando de la manipulación interesada que los poderosos hacen de la situación económica, Juan Torres López y Alberto Garzón Espinosa, en Altereconomía, desvelan sus razones y la necesidad de poner coto a tales despropósitos. Lean, lean….

¿Quién dice que la crisis ha terminado?
El ataque especulativo sobre algunos países europeos como España y Grecia ha puesto de relieve la dramática actualidad de una crisis que los mandatarios tratan de dar por finalizada. Pero, sobre todo, ha servido para revelar una vez más que ni siquiera unos simples remiendos son posibles en el marco del capitalismo neoliberal de nuestros días.
Desde que reconocieron la crisis en el verano de 2007 las únicas medidas aprobadas han sido de carácter paliativo y han requerido un desembolso millonario que ha provenido fundamentalmente de las arcas públicas. Y, a pesar de las promesas lanzadas en las primeras páginas de los periódicos, no se ha llevado a cabo ninguna reforma estructural que pretenda evitar una nueva crisis. Para ocultar esta evidencia, que revela la falta de compromiso con la erradicación de los problemas de fondo que han generado la crisis, la atención general se ha desviado en todo momento hacia problemas de segundo orden, como la Gripe A, que ha servido como cortina de humo para esconder la negligencia financiera de quienes gobiernan.
Más de dos años y medio después se nos repite incesantemente como otra mentira de gran calado que la crisis ha terminado. Habríamos presenciado, según esta visión, un fenómeno pasajero producto de un cúmulo de circunstancias no deseadas aunque prácticamente azarosas, y resuelto gracias a la eficacia de las medidas económicas aplicadas. Todo con tal de no reconocer que estamos ante una crisis más de carácter estructural, aunque sta especialmente grave y sistémica, que está imbricada en el funcionamiento mismo del capitalismo contemporáneo, esto es, del capitalismo que se ha llamado financierizado.
Por eso es que no pueden hacer nada para cambiar las bases de este capitalismo financierizado. La disociación entre la actividad financiera y la actividad productiva continúa acrecentándose, y mientras las finanzas recuperan su salud con la misma velocidad a la que se le inyectaron ingentes cantidades de dinero, la economía real sigue resintiéndose gravemente con altos índices de desempleo y bajo crecimiento económico. O se acaba radicalmente con eso, o se sufre con todas sus consecuencias.
Para quienes invierten en los mercados financieros la situación continúa siendo excelente. Las subidas de la bolsa y las consecuentes ganancias en la compra-venta de acciones y el reparto de dividendos, y las actividades especulativas de los inversores financieros (en especial los fondos de alto riesgo como los que atacaron a España y Grecia hace unos días) siguen ofreciendo altos niveles de rentabilidad. El casino se mantiene abierto.
Pero la contraparte continúa sufriendo los mismos e innumerables problemas de siempre y con unos fundamentos muy débiles. La economía real sigue sin levantar cabeza y el paro aflige a millones de personas, mientras el débil crecimiento económico no invita a esperar una pronta mejora en dicha situación. Las arcas públicas se han vaciado y las deudas de los Estados amenazan con recortes presupuestarios que deteriorarán aún más los precarios sistemas públicos.
Aprovechando esta coyuntura y ante la falta de fuerza de la izquierda política y social, una nueva estrategia neoliberal está en ciernes y la Unión Europea –un organismo altamente antidemocrático- es la correa de transmisión que servirá para imponer a los diferentes países su visión dogmática y errada de la economía. Grecia ha sido el primer país en tener que acometer unos ajustes claramente regresivos, pero sin duda detrás del país heleno vendrán muchos otros más. Estamos presenciando la restauración del neoliberalismo, pero en una versión mucho más salvaje de todas las que habíamos visto hasta ahora en Europa.
Y, parece obvio decirlo, pero si las bases de este capitalismo financierizado se mantienen actualmente tan firmes, entonces estamos asistiendo también a una verdadera huída hacia delante que no hará sino posponer la llegada de una nueva crisis, esta vez mucho más fuerte. Una crisis que se cebará una vez más y, sobre todo, con los más desfavorecidos. Una crisis que no será sino la segunda parte de la actual, de la que se está huyendo sin mirar cómo.
Una vez más hemos de señalar que la única respuesta al renovado tsunami neoliberal que se avecina es la unión de todos los sectores y movimientos progresistas y la más amplia movilización intelectual y social para dar respuestas en todos los frentes a las agresiones laborales y humanas que se están cocinando una vez más, aunque ahora con fuerza quizá inusitada.

EL HEDOR DE LA BASURA

Llevo dos días conteniendo la rabia que las declaraciones del ministro de trabajo me ha producido y espero que ese sentir no guíe estas letras.
Por algún sitio de este blog ya me he preguntado sobre la actitud y la correspondiente decisión que tomarían los accionistas de Coca-Cola si su presidente recomendase públicamente que sus clientes tomasen Pepsi-Cola. Seguro que su permanencia en el cargo a partir de entonces se mediría en minutos. Lo normal cuando las reglas de juego están claras.
Por el contrario en esto que por aquí llaman la política no solo las reglas no están claras, es que se han esforzado en enturbiar tanto los principios que deberían regir la acción política en democracia, que se acepta como normal, como aceptable, incluso como una forma abnegada de cumplir con su deber que el mas alto encargado gubernativo de proteger, defender y en lo posible ampliar el sistema de pensiones público nos recomiende a todos los trabajadores que nos hagamos un plan de pensiones privado. ¡Con dos coj…s!.
No hace mucho tiempo, el llamado presidente de la patronal, el sr. Díaz Ferran, nos dijo sin rubor alguno que él, siendo dueño de la compañía de aviación Air Comet, nunca le compraría un billete a pesar de que en aquel entonces esa compañía estaba en trance de quebrar. Ni que decir tiene que el escándalo mediático y social que tal declaración produjo fue la adecuada respuesta a tan cínico proceder.
Como se puede apreciar en la comparación de ambos casos, las reacciones mediáticas y sociales son bien distintas. En el primer caso, los periodistas, en lugar de resaltar la corrupción en las funciones en que incurre el ministro de trabajo, se han dedicado a indagar sobre quienes de los jerifaltes de la política tienen planes de pensiones privados, mientras que en el segundo ejemplo, al tratarse de un cínico y arribista empresario, amigo y beneficiario de Aznar, y admirador de la lideresa madrileña, esa que según el patrón de la CEOE es cojonuda, entonces leña al mono, que para los plumillas está justificado, entre otras cosas porque el presupuesto del Ministerio de Trabajo es mucho mayor que el de la CEOE.
Ante estos hechos pareciera que nadie se extraña, que nadie se escandaliza, que todo se admite y se considera normal, que las tragaderas de la ciudadanía no tienen limite y aguantan todos los desmanes con que los poderosos nos obsequian. Y no. Estoy convencido que todo tiene un limite, que existe un punto en el cual las sociedades reaccionan, que el cántaro de la corrupción y sus portadores acaban obteniendo el trato que merecen, como poco desprecio, si no cárcel.
La única duda que tengo es hasta cuando. Hasta cuando soportaremos la acumulación inmundicias. Hasta cuando la revisión al alza de las tarifas eléctricas irán asociadas a intermediaciones bursátiles concretas. Hasta cuando la compra multimillonaria de vacunas para pandemias inexistentes se disociará de una interesada gestión ante los laboratorios farmacéuticos nacionales e internacionales. Hasta cuando todo un consejo de ministros va a seguir legislando para que dos ladrilleros dominen en dos grandes empresas publicas privatizadas. Hasta cuando se aceptará que alguien extraído de la dirección de la SGAE legisle a favor de la misma. Hasta cuando se aceptará que los gobiernos utilicen los dineros públicos para dotarse de grupos de comunicación que les respalden desde la mentira y la confrontación con el discrepante.
Hasta cuando aguantaremos que la política en España sea impermeable a la decencia.
Menos mal que contamos con una institución que se bate duramente contra todo tipo de corrupción, el Defensor del Pueblo.

miércoles, 10 de marzo de 2010

PRIME TIME……..LOST TIME.

Cuando la televisión pública nos regala, en horario estelar, nada menos que toda una hora con sus periodistas estrella entrevistando al presidente estrellado, no cabe esperar de este, dada la situación y los antecedentes, otra cosa que disculpas y propaganda.
Sin embargo hay quien se ha sorprendido de la falta de fuste político del entrevistado, y así, “El País” titula hoy su editorial “Oportunidad Perdida” cuando, si fuesen coherentes con sus planteamientos políticos y económicos, los de Miguel Yuste debieran haberlo titulado…”Pero, ¿en qué manos estamos?”
Sin entrar en las propuestas que el diario respalda como soluciones a la crisis económica, soluciones que no comparto, sí suscribo, en cambio, los retazos que de su editorial siguen:

“La concreción y pertinencia de los asuntos suscitados por los entrevistadores acabaron por poner en evidencia un discurso del presidente genérico y rutinario, que daba la impresión de querer ocultar tras largas parrafadas la falta de congruencia entre las respuestas y las preguntas”.
“Pero lo que sobre todo faltó fue una visión política que jerarquizara las prioridades en un discurso claro”.
“Dio la impresión de no querer ser portavoz de una visión más realista pero desagradable, y prefirió buscar una identificación sentimental con los que sufren los efectos de la crisis”.

Cuando un editorial de este calibre está respaldado por el que ha venido siendo periódico de cabecera y escudo mediático del zapaterismo hasta el momento en que la “infidelidad roureriana” produjo el divorcio aparente que hoy, ambas partes, soportan, es que los puentes se han roto.
Hasta aquí nada nuevo respecto a las relaciones entre esos dos centros de poder, lo novedoso es que, acuciado el de la Moncloa por el poder económico nacional que le exige actuar y rápido en el sentido de favorecer sus intereses, y del otro lado, aparentemente resueltas las dificultades económicas de Prisa, estos se han decantado abierta y, quizás, definitivamente en contra de este régimen que ni chicha ni “limoná” ya que es mas que evidente que es un régimen que apunta medidas en la dirección que les exigen los poderosos pero que no se atreve a implantarlas con contundencia exigida, ya que ventean los zapateristas la reacción adversa de aquellos a los que hasta hace poco decían que harían más por los que menos tienen.
Entre tanta divagación zapateriana sucede que el empleo que se iba a empezar a recuperar en el segundo semestre parece que se retrasará hasta el año que viene o así; que ahora caen en la cuenta que lo de quitar el impuesto sobre el patrimonio fue un error y al parecer imposible de rectificar; que también ahora aceptan que la subida del IVA prevista para junio incidirá negativamente en los precios, y por no hacer eterno el relato de las ocurrencias zapaterianas, se les ha ocurrido que hay que solucionar la crisis luchando contra el fraude fiscal, y se han marcado como objetivo el recaudar mil millones de euros mas de la bolsa de fraude que segun ellos se da en el IRPF, pero por supuesto nada de rebuscar en los oceanos de fraude y economia sumergida que evidencia el impuesto de sociedades o en las sicavs.
En resumidas cuentas, están perdidos, están desconcertados, están asustados y, con perdón, están con el culo al aire, ya que tras dos años y medio de soportar el incremento del malestar social que genera el convivir con cinco millones de parados, el líder de la conjunción planetaria nos acaba de demostrar que ni sabe, ni contesta.

martes, 9 de marzo de 2010

EL ESTADO DE DERECH”A”

Tras más de treinta años de apariencia democrática, -partidos políticos, sindicatos de clase, elecciones periódicas y medios de comunicación plurales-, se vienen apreciando desde hace algún tiempo los limites impuestos al sistema por los mismos poderes que entonces nos impusieron la llamada transición.
De entonces acá las estructuras políticas, económicas, sindicales, administrativas y militares del franquismo han pasado por una transformación mas o menos intensa y/o adecuada a los principios de una democracia liberal pero en nuestro caso una democracia liberal otorgada.
Fue entonces evidente la rápida transformación de los estamentos políticos franquistas, ya que la simple aparición de los partidos políticos de izquierda obligó a los residuos activos del franquismo a cobijarse en partidos políticos claramente derechistas pero con apariencia democrática.
De forma igualmente rápida y eficaz los sindicatos de clase comenzaron, ya desde la legalidad, a ejercer el papel de fuerza representativa de los trabajadores y contrapuesta al poder del empresariado.
Mas lentamente pero no con menos impulso y decisión las estructuras administrativas del estado se adaptaron a la nueva división constitucional del estado democrático, y el ejercito, el gran y poderoso reducto del franquismo mas atrabiliario, aun con pulsos al poder civil, acabó por aceptar al sistema y a los legítimos gobernantes del país.
No se puede omitir que en el inicial impulso democrático de la transición, el no tan fallido golpe de estado del 23-F, introdujo en el posterior recorrido hacia la democracia un poderosísimo freno. Freno que ha logrado que treinta y dos años mas tarde se estén cuestionando y reduciendo derechos civiles, tanto individuales como colectivos, y otros derechos de carácter esencialmente económico contemplados en la constitución, ni tan siquiera se han comenzado a desarrollar.
Así las cosas, hemos llegado a un punto en el que ya es innegable que los dos sectores que permanecen incólumes a la reforma democrática, los dos ámbitos que permanecen impermeables a los cada vez mas reducidos o impracticables principios democráticos, son el poder económico y el judicial.
Del primero baste recordar que el 80 % del PIB español está en manos de solo cien familias, y que esas cien familias siguen actuando de idéntica forma con la que con el dictador actuaban y hacían negocios.
Hoy, cuando el poder económico y financiero español se niega a ejercer la labor social de financiar la actividad empresarial nacional con tal de no aflorar las perdidas que el exceso de “ladrillo” les ha provocado, siguen teniendo a los presupuestos generales del estado como algo propio que se reparte y trocea de la misma forma que antaño, en cacerías y lujosos comederos.
Esta concepción por la cual se sienten dueños del dinero publico, es la que, con la generalizada corrupción de todos los que están y viven de la política, -unos corruptos activos y otros pasivos o consentidores-, les está llevando a reducir día a día los espacios de participación y decisión democráticos y a la practica anulación de derechos ciudadanos que una muy aceptable constitución contempla, pero que vigilados esos derechos por un tribunal constitucional politizado, abúlico y ausente de los problemas de la ciudadanía, solo velan, al igual que sus designadores, por su permanencia en tan alto estatus jurídico, social y económico.
Y como las fronteras entre lo económico y lo jurídico no existen sino todo lo contrario, hemos llegado al ultimo reducto intocado del franquismo.
No merece la pena el analizar la permanencia en el poder judicial de la totalidad del estamento judicial franquista en los años de la transición. Tampoco, por sabido, merece extenderse sobre las formas de acceso a la carrera judicial y el control que sobre él ejercen determinados nombres de santones judiciales franquistas, o sus descendientes, y alguna asociación claramente antisistema.
No es necesario recordar como la politización de los máximos órganos judiciales del país están corrompidos desde su origen al ser sus componentes simples representantes de corrompidos e interesados partidos políticos.
Lo que si hay que destacar y decir en voz bien alta es que con estos dos grandes poderes, el económico y el judicial, prácticamente intactos, mayoritariamente regidos por franquistas y por lo tanto renuentes a cualquier atisbo de avance social, no es de extrañar que suceda lo que hoy, sin asombro alguno, estamos contemplando, que aquel o aquellos que han osado solo investigar la corrupción política y económica actual, que han osado solo adentrarse en la practica de la Ley de la memoria histórica, acabarán como antaño los disidentes del franquismo, ante el TOP, el tribunal de orden publico, el cual estaba también encargado de reprimir a la masonería y al comunismo.
Hoy, con otra denominación pero con el mismo espíritu de cruzados, han “reconstruido” su Bastilla y se aprestan a aplicar a un colega díscolo las medidas que estimen necesarias para recordar que con las cosas de su comer no se juega. Hoy se puede decir mas alto pero no mas claro de cómo lo hace Jiménez Villarejo en “El País”, “la extrema derecha ha sometido al tribunal supremo” y “Llevamos 25 años en que las asociaciones de jueces y fiscales, conservadoras y progresistas, han celebrado congresos comiendo en la mano de los bancos y cajas de ahorro”
Llevaba razón Guerra cuando dijo, hace tiempo, que Montesquieu había muerto, lo malo es que aquel “asesinato”, -la politización de la judicatura-, ha dado lugar a que los socialistas de hoy, los zapateristas, respalden, defiendan y coloquen en los puestos de más alta alcurnia judicial a los jueces mas derechistas. Así les va.

lunes, 8 de marzo de 2010

POCO, O NADA, QUE CELEBRAR

Según el Instituto Nacional de Estadística mediante su Encuesta de población activa correspondiente al cuarto trimestre de 2009 pone en nuestro conocimiento que:
1º.- Que la acción despedidora del empresariado español se tradujo en que 310.800 mujeres más hayan engrosado las listas del desempleo durante 2009.
2º.- Que de los 2.470.700 ocupados a tiempo parcial, 1.917.800 eran mujeres, lo cual representa el 77,62 %, evidencia contundente sobre quienes soportan mayoritariamente la inseguridad y la precariedad laboral.
3º.- Que mientras el índice de ocupación entre los hombres es del 66,4 %, el de las mujeres es de solo el 53 %.
4º.- Que mientras la tasa de paro entre los hombres era a 31 de diciembre del 18,64 %, la correspondiente a las mujeres era del 19,07 %.
Y 5º.- Que la diferencia salarial de genero, a igualdad de trabajo, se ha incrementado en ese año 2009 en el 8,66%, ya que de soportar una diferencia del 25,4 % en 2008, hemos pasado a que las mujeres trabajadoras hayan tenido que soportar unos ingresos inferiores en el 27,6 % respecto a lo cobrado por los hombres a igual trabajo.

Claro que ninguna de estas ofensivas desigualdades afecta a todas aquellas y aquellos instalados confortablemente en la propaganda y el dinero del igualitarismo zapaterista. Son todas/os esos que tras años de propaganda no consiguen alcanzar el mas mínimo soporte real, sea económico, laboral o asistencial, que permita adivinar cambio social alguno en las condiciones de la mujer trabajadora en España, esos que con total desfachatez siguen cacareando lo contrario de forma incesante. Mientras, cada día es mas evidente que solo ellas/os obtienen huevos de su falso proceder.
Y es que no puede suceder otra cosa cuando a la igualdad se le posponen calificativos o sustantivos varios. Cuando a la igualdad se la moteja de cualquier forma deja de ser ese concepto global que vino identificando el horizonte hacia el que pretendían caminar los hombres y las mujeres de izquierda, pasando a convertirse en otro espacio de negocio más o menos privado.
En resumen, zapaterismo. Propaganda, mentiras y negocios privados con dinero publico.

jueves, 4 de marzo de 2010

LO CORTÉS NO QUITA LO VALIENTE

Hace solo unos días era la “penúltima” ocasión en la que, ante la pantomima que fueron las manifestaciones de los dos sindicatos mayoritarios, aquí les daba “cera” sin mucha piedad. Para qué negarlo.
Hoy, sin cambiar de opinión respecto al papel, más bien papelón, que están representando los sindicatos en la crisis y en las posibles negociaciones con patronal y gobierno, no tengo por menos que aplaudir un documento que titulado “La reforma de las pensiones, la verdad oculta” ha elaborado la Federación de Servicios Públicos de la UGT de Galicia.
Para todos aquellos que aun mantengan algún resto de credibilidad hacia el antiguo sindicato socialista, les adjunto el enlace para que puedan constatar con esta otra opinión sindical, de qué va realmente eso de “sostener al debilitado sistema público de pensiones” que el zapaterismo nos va a imponer.

http://galicia.fspugt.es/Reforma_de_las_pensiones_La_verdad_oculta.htm

miércoles, 3 de marzo de 2010

!UNOS SANTOS¡

Desde ayer estoy en parecido trance al que decía encontrarse la santa aquella que tenía prisa por morirse. Que vivo sin vivir en mi. Y no porque espere tan alta dicha como ella, no, sino porque ya no sabe uno a que carta quedarse con lo del paro y las lecturas que de él hacen los que lo provocan y los que lo consienten.
Resulta que en febrero los “emprendespedidores” patrios han puesto en la calle a unos ochenta mil trabajadores más de los que en ese mes han contratado, pero para los habladores oficiales, estos ochenta mil dramas personales y familiares son una buena noticia, ya que son la mitad de dramas de los habidos en febrero de 2009.
Resulta que teniendo como tenemos 4.130.625 parados según el INEM, los mismos portavoces oficiales del sistema parecen alegrarse por la ralentización del crecimiento del paro, pero por si acaso alguien se decidiese a lanzar cohetes por tan buena nueva, el ministro Corbacho se ha encargado de apagar todas las mechas diciendo que la cosa va a seguir muy malamente durante los próximos meses.
Por otra parte, y como en tantas otras cosas, los metalenguajes que emplean están diseñados para confundir y orientar tendenciosamente posteriores opiniones. La mejor demostración es como eluden analizar el origen, la causa del paro y en vez de hablar de despidos, labor solo imputable a los empresarios, solo se habla de paro y de tal forma que casi, y en ocasiones sin el casi, se culpabiliza al trabajador despedido de su situación de parado.
Y no se limitan a utilizar argucias y subterfugios con el lenguaje, puesto que tales triquiñuelas calan y acaban siendo aceptadas por la ciudadanía, se han atrevido a establecer mecanismos igualmente tramposos que oculten parcialmente la realidad, la terrible realidad de los millones de trabajadores que no pueden ejercer en este país su derecho constitucional a tener un trabajo digno.
Desde el pasado mes de julio y voceándolo como una muestras más del profundo carácter social del zapaterismo, pusieron en marcha un procedimiento encaminado a ralentizar el crecimiento de la cifra de parados. Digo bien, ralentizar el crecimiento de la cifra de parados que no a disminuir en numero de parados. Como todos sabemos establecieron un nuevo mecanismo por el cual los parados que desde ese mes de julio pasado agotasen las prestaciones por desempleo, pasarían a engrosar las listas del llamado PRODI, programa por el cual a cambio de recibir durante seis meses la pírrica cantidad de 421 euros, los perceptores se comprometían a realizar los cursos de formación que se les indicase, por lo que al recibir ese dinero y estableciéndose como contraprestación la asistencia a esos cursos, el legislador, los zapateristas, determinaron que esos trabajadores pasaban a estar ocupados y por lo tanto causaban baja en las listas de parados.
Según los datos, muy ocultos, de las empresas a las que se les ha imputado el control de tales bajas a fin de que no pueda darse la circunstancia de que algún “desaprensivo” funcionario se vaya de la lengua, a lo largo del segundo semestre del año 2009 una media de 250.000 trabajadores en paro no ocuparon el lugar real que les correspondía, la lista de desempleados del INEM, máxime si tenemos en cuenta que la inmensa mayoría de ellos no ha realizado curso de formación alguno, ya que la organización de esos cursos fue atribuida a las Comunidades Autónomas, y estas no los han puesto en marcha, unas por no haber dotación presupuestaria especifica para este fin y otras por no tener infraestructuras adecuadas para poder impartirlos.
Así las cosas y vistos los resultados de tan artificial como tramposa “ralentización” decidieron prorrogar a este primer semestre de este año los buenos resultados que tal maniobra les estaba rindiendo.
Por todo lo anterior hay que concluir en algo que todos sabíamos pero que en estos momentos es peligroso verbalizar, que en este país la industria del paro es la numero uno, de la que muchos de los causantes del paro y de los que debieran impedirlo sacan altísimos rendimientos, conclusión esta a la que hay que sumar la firme determinación que han tomado tanto las derechas políticas como las económicas y sindicales de hacer pagar el coste económico y social del despido a quienes lo sufren, no a quien lo provoca.
En resumidas cuentas, que lo de vivir sin vivir en mi, me temo que es algo, desgraciadamente, muy extendido. Seguro que afecta a mas de cinco millones de ciudadanos españoles para quienes la única alta dicha que esperan no es precisamente estar a la derecha de dios, se conforman con vivir esta su vida con la dignidad y seguridad que da el trabajo. Unos auténticos santos.

martes, 2 de marzo de 2010

PEPIÑO LLEVA RAZON

La prensa de hoy reproduce algo así como una petición de auxilio, miejita lastimera, que ayer lanzó el don Pepiño. Al parecer dijo que todo esto de la crisis es cuestión de confianza, y miren por donde, por una vez y sin que sirva de precedente, estoy de acuerdo, (ma non troppo), con la afirmación el cancerbero del PSOE.
Cierto que para que la economía capitalista funcione es necesario que los hoy llamados emprendedores, -parece que a los progresistas les da urticaria nombrarles como empresarios o patronos-, estos necesitan confiar en que sus determinaciones empresariales les conducirán directamente al beneficio.
Tan cierto como lo anterior es que esas determinaciones empresariales se sustentan siempre en la inversión, bien de capital ajeno o de aquellas reservas previamente obtenidas por la empresa. Por lo tanto es imprescindible para la generación de empleo y riqueza la inversión empresarial y para que esta exista ha de existir un fluido canal de financiación ajena.
Y esto es lo que no está funcionando en este país. La banca, bancos y cajas, han decidido que no se dan las condiciones para retomar la senda de la financiación, siquiera sea selectiva de las empresas que con proyectos solventes y viables acuden al crédito bancario.
Igualmente cierto es que tras un desembolso multimillonario que el Estado ha hecho a fin de conseguir que se reestableciesen esos cauces de financiación, el cauce parece mantenerse como estaba, atascado, ya que las oficinas bancarias tienen instrucciones de centrar su actividad en la captación de pasivo. Nada de abrir el grifo de los créditos.
Pero dicho lo anterior no se puede orillar que la mayor de las confianzas que coopera de forma determinante a que la economía se active, es la confianza que todos los agentes económicos y sociales depositan, tras analizarlas, en las determinaciones del consejo de administración de la empresa mas poderosa de España, el Consejo de Ministros. Y hay que decir que de la secuencia de las determinaciones económicas de estos aprendices de empresarios solo emana incertidumbre, contradicciones y desconfianza, por lo que hoy por hoy solo consiguen lo contrario de lo pretendido ya que para los inversores su enmarañado conjunto de decisiones solo les ha provocado desconfianza y confusión.
Se han dilapidado miles de millones de euros en salvar a políticos metidos a banqueros a los que el tiempo y el estallido de la burbuja inmobiliaria han puesto en su lugar, unos simples especuladores. Se han regado a las empresas del ladrillo con una lluvia de millones sin contraprestación económica o social alguno. Por estos motivos se está incrementando la deuda publica española hasta limites que han alarmado a los inversores y especuladores internacionales.
Y junto a este diluvio de millones para los que más tienen, para los que se niegan a cumplir con su función social de prestar dinero, solo toman la determinación de subir los impuestos a los que menos tienen.
Y hoy, en su afán de dar solidez a esa confianza que reclaman, se desdicen de lo que tan solo hace dos meses era el tótem del futuro económico español para el zapaterismo, la Ley de Economía Sostenible. Hoy, han concluido que la solución a los males de la economía española pasa por establecer ayudas publicas para que el ladrillo, de nuevo, tire de la actividad económica y del empleo.
Se han acabado las ínfulas ecologistas, se han acabado las grandezas de la I+D+i, se han acabado los brotes verdes y pretenden que lo que brote de esta ultima ocurrencia sea, otra vez, de color teja.
Lleva razón Pepiño cuando afirma que lo fundamental es generar confianza, y como le tengo por un bicho de los que si se muerde la lengua, se envenena, me pregunto si su afirmación va dirigida a los empresarios y banqueros, al pueblo en general, o al extraviado Zp.

lunes, 1 de marzo de 2010

NOS LA QUIEREN DAR CON QUESO

El pasado viernes, en la reunión del Consejo de Ministros, se decidió incrementar el fondo de reserva de la Seguridad Social con 1740 millones de euros, lo cual supone alcanzar la nada despreciable cifra de más de sesenta y dos mil millones de euros.
Estoy seguro de que más de un fanático zapaterista habrá puesto en marcha el botafumeiro en Ferraz loando el “multimillonario” carácter social de este gobierno, a quien tanto quieren y, sobretodo, a quien tanto deben. Y no es de extrañar su proceder, ya que al estar presentada de esta forma la información, solo cabe la alabanza.
Pero sucede que, como casi todo en este régimen de mentiras y/o verdades a medias, la noticia está interesadamente mutilada puesto que faltan por exponer varios aspectos de lo más interesante.
En primer lugar que esos 1.740 millones de euros que ahora se ingresan en el fondo de reserva se imputan al superávit de la Seguridad Social habido en el año 2008, superávit que alcanzo la cifra de 14.428 millones de euros, los cuales, con el total acuerdo de los comisionistas sociales, perdón, de los interlocutores sociales, se destinaron en su totalidad a capital circulante de la Tesorería General a fin de que esta pudiera aplicar las instrucciones políticas recibidas, que en contra de lo que pudiera pensarse, en atención al supuesto progresismo gubernativo, no eran instrucciones encaminadas a dar aplicación a la subida de las pensiones, no, las instrucciones emanadas del gobierno se centraban exclusivamente en facilitar el aplazamiento de pago de las cuotas de las empresas.
Por ello, este viernes pasado, lo único que han hecho los zapateristas ha sido restituir una mínima parte del compromiso de ingreso que por valor de 9400 millones se comprometieron a realizar en el fondo, lo cual para mas “inri” suponía, según la mas elemental matemática, que del superávit total habido ese año se derivaron 5028 millones a otros fines nada relacionados con la protección social.
Para ir cerrando el vicioso circulo de manejos económicos con los fondos de la Seguridad Social ha de saberse que también la totalidad de los 8501 millones de euros de superávit que las cuentas de la S. Social tuvieron en el pasado año 2009, han corrido la misma suerte que los habidos en 2008, han sido destinados en su totalidad a la libre disposición del gobierno, habiéndose suspendido, también con el beneplácito, -supongo que oneroso-, de los mismos interlocutores sociales, que tengo para mi que no dan abasto con tanta transferencia.
Por ultimo recordar que a 31-12-08, último dato del informe de la comisión gestora del Fondo de Reserva a las Cortes españolas, refleja que excepto el 0,11 % del fondo de reserva está invertido en activos financieros, y aunque pueda ser un poco árida la exposición siguiente, entiendo que es interesante saber de la poca liquidez de esas inversiones ya que el 34,2 % esta puesto en emisiones publicas con vencimiento a 3 años, el 23,6 % esta colocado igualmente en emisiones publicas a 5 años, y el 28,18 % lo está en valores con vencimiento a 10 años, por lo que tan solo el 14 % esta invertido en letras del tesoro a menos de tres años.
Ni que decir tiene que es el estado español el máximo deudor de la Seguridad Social, ya que esta tiene en su poder valores públicos por importe, a precio de adquisición, de 32.228 millones de euros, lo cual representa el 56,38 % del total invertido en deuda publica, por lo que se deduce que el 43,62 %, o sea el equivalente a 24.930 millones de euros están invertidos en deuda publica de estados vecinos.
En esta situación puede aventurarse que no deben vislumbrar estos negociantes de lo ajeno incertidumbre alguna sobre la suficiencia y continuidad de las finanzas del sistema de protección social, pues de otro modo la liquidez de la inversión financiera primarÍa sobre la seguridad y la rentabilidad.
Por lo tanto estamos otra vez ante una nueva serie de datos que niegan la mayor, la necesidad de reformar el sistema de pensiones, -por supuesto que a la baja-, y por el contrario, esos mismos datos, constatan la realidad de que la Seguridad Social está siendo utilizada como una saneadísima y manipulable fuente de financiación y sostenimiento de los que han provocado la crisis.