A CONTRAPELO

Hace unos días se conoció que son los trabajadores españoles los que, de entre los paises de la Europa de los 15, mas tarde se jubilan, a una edad media de 62 años. Significa esto que son los trabajadores españoles los que durante mas tiempo cotizan al sistema de protección social que a partir del momento de la jubilación les aporta sus ingresos.

Por lo anterior, y a igualdad de expectativas de vida, son los trabajadores españoles jubilados los que durante menos tiempo y menor cuantia dineraría reciben del sistema al que en su vida laboral activa sostuvieron con sus aportaciones.
En ese estudio se ponía de relieve la lenta pero nítida tendencia que en el resto de paises europeos se dá hacia la reducción de la edad de jubilación, la cual se viene reduciendo inténsamente en aquellas profesiones y oficios que por su naturaleza no permiten que personas de edad avanzada las desarrollen sin un alto riesgo laboral para si mismos y para los demás, o bien por razones de carácter sicológico, cual es el caso de los maestros que han de lidiar con algunos jovenes cada dia menos proclives a mantener formas y respeto en las aulas.

Junto a los anteriores, camioneros, albañiles, electricistas, operarios de maquinaría pesada y tantos otros que siendo trabajadores manuales o de los llamados de cuello blanco, no pueden, por simple cuestión de edad, mantener un nivel de concentración síquica o física como otros más jovenes.

Es decir, en el resto de Europa se tiene en cuenta una realidad vital, que en distinto grado a todos afecta, para acompasar a esa realidad la protección social.

Aqui, por el contrario, se camina o se intenta caminar en sentido opuesto.

La ultima ocurrencia zapateril ha sido poner una zanahoria en el extremo del palo con que dirigen a los trabajadores. Les han dicho, "si vd. no se jubila a los 65 años y prorroga su vida laboral activa, por cada año que la prorrogue, le incrementamos un 3% la pensión que le corresponda".

No sé yo si picarán muchos trabajadores, pero si los que pudieran convertirse en pescados echasen cuentas verían que las cuentas no les han de salir. Que tomen como horizonte vital la esperanza de vida de la mujer u hombre español, que multipliquen lo que pagan a la seguridad social mensualmente por 12 y por el numero de años que estimen fuesen a prorrogar su actividad laboral, guarden esta cifra en su memoria, y restenle el resultado de calcular el 3, el 6, el, 9 % y así sucesivamente hasta el numero de años que hayan determinado que va a ser su prorroga, apliquen ese porcentaje a la pensión que se estime corresponda y esta cantidad multipliquese por el numero de meses y años que resten hasta la edad en que esté cifrada la esperanza de vida. En este punto se podrá comprobar que a euros constantes el negocio es negativo para los trabajadores que "piquen".

Pero si vergonzoso es esto, peor es que el sistema pretenda mantener activos a trabajadores que a unas edades avanzadas, diferentes en cada caso, serían, como ya he dicho, un peligro para si y para los que los rodeasen, con lo cual se demuestra que en Europa se camina en un sentido que al menos reconoce la realidad social, y en España, al reves, y todo con tal de mantener el mensaje falso y alarmista creado por los interesados en el participar en el negocio, de ahí que aboguen por la privatización de las pensiones, manteniendo que "el sistema no se sostiene", y pretendiendo que sigan cotizando aquellos que deberían pasar a ser receptores de la proteccion del sistema. Además, con esta formula consiguen que no haya relevo generacional, y tienen a la juventud mejor preparada, sometida a sus designios ante la escasez de puestos de trabajo cualificados.

No conozco la participación en la siniestralidad laboral de sectores de trabajadores con edades por encima de 55 años, supongo que según el sector de actividad que se contemple, habrá mayor o menor incidencia, pero si se comparasen estos datos con la pirámide de edad de los trabajadores activos, quizas se encontrase otro soporte para variar el camino a contrapelo que respecto a Europa llevamos.

Como decia un celebrado anuncio de los ochenta ¿y a todo esto, que dicen.......los sindicatos?

Pues lo de siempre......"silencio en la noche, ya todo está en calma".