No hay día en que no aflore una nueva especie endémica de corrupción política y económica. La ultima, revestida de folletín familiar, pone de manifiesto hasta donde llega la capacidad del zapaterismo para envolver en mentiras lo que descarnadamente son intereses de grupo y ansias particulares de pillar cargos y presupuesto publico.
He estado recientemente en Benidorm, y un industrial del turismo me ha relatado las presiones y amenazas que soporta a diario ejercidas por la mafia de la “protección” que, a cambio de dinero, proporciona permisos, licencias y seguridad a los locales públicos. Me ha contado como se viene resistiendo al chantaje de “paisanos” que de día portan placa, y cómo, con más frecuencia de la que la estadística soporta, las peleas perfectamente orquestadas por grupos de matones han asolado más de una vez su local.
Me ha mostrado antiguas denuncias de tales hechos antes las diversas instancias policiales, judiciales y políticas, de las cuales solo se ha derivado un incremento de las amenazas recibidas.
Me ha acabado relatando cuan extendido, y tácitamente aceptado, está este proceder en la cuna de la corrupción ladrillera levantina, y me ha explicado el rechazo obtenido cuando a la oposición política municipal (PSPV-PSOE) informó sobre su situación y sus problemas.
Y puesto que, aun con la gravedad de lo hasta aquí relatado, pudiera todo ello considerarse mas anécdota que categoría, lo sintomático es que ni gobierno municipal ni oposición han hecho nada por extirpar esa anómala situación, tanto si es puntual como si está generalizada en esa ciudad, que, al parecer si que lo está.
Por eso, hoy, cuando el pasteleo político-familiar, que con el visto-bueno de Ferraz, -léase Pepiño y Zp- certifica que el pillaje y el saqueo de los dineros públicos importa menos que quien es el que de ello se beneficia, se acuerda una formula que a nadie engaña y que está solo diseñada para que pueda coexistir una cosa y su contraria al mismo tiempo. Se ha diseñado esa formula de os vais, y así no os tenemos que echar, para aparentar que el PSOE defiende la decencia de no acordar con transfugas y al tiempo permiten se practique por sus más destacados dirigentes la indecencia de hacerlo, apartándose los directos beneficiarios del chanchullo, de la militancia del PSOE.
¿Quién puede tragarse que todos los concejales del PSOE de Benidorm accedan a perder su militancia tras muchos años de trabajo por su partido de toda la vida si no es a cambio de sustanciosas e inmediatas recompensas y/o seguridades respecto a su futuro en la política? ¿O es que de repente, llegando al Damasco de Terra Mitica, se han caído del caballo zapaterista y coherentes con sus firmes convicciones se alejan de la deriva derechista de Moncloa y Ferraz? ¿O es que a cambio de menos de dos años de disfrute del presupuesto municipal van a tirar por la borda la posibilidad de prolongar tal disfrute por mucho mas tiempo, posibilidad que solo bajo el paraguas de las cada vez mas deterioradas siglas del PSOE podrían conseguir en las próximas elecciones? ¿Cómo es posible que pretendan que creamos que toda la militancia del PSOE de Benidorm acepta sin rechazo alguno que se viole un pacto anti-transfuguismo que a todos, a todos los militantes obliga, se llamen como se llamen, y que ante tal violación ninguno de ellos haya antepuesto su honradez y dignidad a la conveniencia ilegal de aquellos que solo pretenden conseguir el clásico quítate tu para ponerme yo y así tener la llave de los dineros, de los abundantes dineros públicos municipales de Benidorm?
Hoy, los diarios afines al zapaterismo contraponen a esta nueva corrupción de la dirigencia zapateril los muchos casos de transfuguismo político que en esa misma región se han dado por parte del PP y especialmente el que hace diez y seis años catapultó a Zapalana al logro de su máximo objetivo personal, hacerse rico con la política, como si tal enumeración paliase la indecencia de lo que en Benidorm y en Ferraz se ha convenido.
Y es que los paralelismos, las coincidencias y los procedimientos de los corruptos son iguales estén en una nomina partidaria o en otra. Ni que decir tiene que don Eduardo lo ha conseguido, pero no está solo. Hoy, es evidente que una “aprendiza” aventajada está en ese mismo camino, ya que ingresar casi veinte mil euros al mes directa o indirectamente del erario publico,- ex secretaria de estado de cooperación internacional, futura senadora y secretaria de organización del PSOE-, deja a la antigua carrera de don Eduardo como la carrera hacia el enriquecimiento personal en la política mas lenta jamás vista, con el añadido de que ella, doña Leire, tiene colocados a papá, secretario general del PSOE de Benidorm y amiguito del alma de Zp, y a mamá como próxima concejala (¿de urbanismo?).
Lo mas aterrador es que todo esto sí que es una pandemia, y no la del “bichito” de la Trini, ya que siempre que en cualquier ayuntamiento, unos u otros, han tenido la ocasión de desalojar al contrario con la ayuda, siempre interesada, de un tránsfuga, siempre se ha dado el vuelco a la situación anterior, y siempre alguien de los nuevos gestores municipales ha tenido la desfachatez de pronunciar la cínica frase de….. “Lo hacemos por el bien de los……….” (póngase el gentilicio de los habitantes de la localidad que cada uno de nosotros conocemos en la que así todos han actuado), frase que con el tiempo se ha demostrado cambiante, ya que el único bien derivado de los pactos con transfugas ha sido el engrose de los patrimonios de quienes la pronunciaron tratando de justificar lo injustificable.
Y es que cuando se abandonan los principios del socialismo y se abrazan los del progresismo ladrillero pasa lo que pasa.
He estado recientemente en Benidorm, y un industrial del turismo me ha relatado las presiones y amenazas que soporta a diario ejercidas por la mafia de la “protección” que, a cambio de dinero, proporciona permisos, licencias y seguridad a los locales públicos. Me ha contado como se viene resistiendo al chantaje de “paisanos” que de día portan placa, y cómo, con más frecuencia de la que la estadística soporta, las peleas perfectamente orquestadas por grupos de matones han asolado más de una vez su local.
Me ha mostrado antiguas denuncias de tales hechos antes las diversas instancias policiales, judiciales y políticas, de las cuales solo se ha derivado un incremento de las amenazas recibidas.
Me ha acabado relatando cuan extendido, y tácitamente aceptado, está este proceder en la cuna de la corrupción ladrillera levantina, y me ha explicado el rechazo obtenido cuando a la oposición política municipal (PSPV-PSOE) informó sobre su situación y sus problemas.
Y puesto que, aun con la gravedad de lo hasta aquí relatado, pudiera todo ello considerarse mas anécdota que categoría, lo sintomático es que ni gobierno municipal ni oposición han hecho nada por extirpar esa anómala situación, tanto si es puntual como si está generalizada en esa ciudad, que, al parecer si que lo está.
Por eso, hoy, cuando el pasteleo político-familiar, que con el visto-bueno de Ferraz, -léase Pepiño y Zp- certifica que el pillaje y el saqueo de los dineros públicos importa menos que quien es el que de ello se beneficia, se acuerda una formula que a nadie engaña y que está solo diseñada para que pueda coexistir una cosa y su contraria al mismo tiempo. Se ha diseñado esa formula de os vais, y así no os tenemos que echar, para aparentar que el PSOE defiende la decencia de no acordar con transfugas y al tiempo permiten se practique por sus más destacados dirigentes la indecencia de hacerlo, apartándose los directos beneficiarios del chanchullo, de la militancia del PSOE.
¿Quién puede tragarse que todos los concejales del PSOE de Benidorm accedan a perder su militancia tras muchos años de trabajo por su partido de toda la vida si no es a cambio de sustanciosas e inmediatas recompensas y/o seguridades respecto a su futuro en la política? ¿O es que de repente, llegando al Damasco de Terra Mitica, se han caído del caballo zapaterista y coherentes con sus firmes convicciones se alejan de la deriva derechista de Moncloa y Ferraz? ¿O es que a cambio de menos de dos años de disfrute del presupuesto municipal van a tirar por la borda la posibilidad de prolongar tal disfrute por mucho mas tiempo, posibilidad que solo bajo el paraguas de las cada vez mas deterioradas siglas del PSOE podrían conseguir en las próximas elecciones? ¿Cómo es posible que pretendan que creamos que toda la militancia del PSOE de Benidorm acepta sin rechazo alguno que se viole un pacto anti-transfuguismo que a todos, a todos los militantes obliga, se llamen como se llamen, y que ante tal violación ninguno de ellos haya antepuesto su honradez y dignidad a la conveniencia ilegal de aquellos que solo pretenden conseguir el clásico quítate tu para ponerme yo y así tener la llave de los dineros, de los abundantes dineros públicos municipales de Benidorm?
Hoy, los diarios afines al zapaterismo contraponen a esta nueva corrupción de la dirigencia zapateril los muchos casos de transfuguismo político que en esa misma región se han dado por parte del PP y especialmente el que hace diez y seis años catapultó a Zapalana al logro de su máximo objetivo personal, hacerse rico con la política, como si tal enumeración paliase la indecencia de lo que en Benidorm y en Ferraz se ha convenido.
Y es que los paralelismos, las coincidencias y los procedimientos de los corruptos son iguales estén en una nomina partidaria o en otra. Ni que decir tiene que don Eduardo lo ha conseguido, pero no está solo. Hoy, es evidente que una “aprendiza” aventajada está en ese mismo camino, ya que ingresar casi veinte mil euros al mes directa o indirectamente del erario publico,- ex secretaria de estado de cooperación internacional, futura senadora y secretaria de organización del PSOE-, deja a la antigua carrera de don Eduardo como la carrera hacia el enriquecimiento personal en la política mas lenta jamás vista, con el añadido de que ella, doña Leire, tiene colocados a papá, secretario general del PSOE de Benidorm y amiguito del alma de Zp, y a mamá como próxima concejala (¿de urbanismo?).
Lo mas aterrador es que todo esto sí que es una pandemia, y no la del “bichito” de la Trini, ya que siempre que en cualquier ayuntamiento, unos u otros, han tenido la ocasión de desalojar al contrario con la ayuda, siempre interesada, de un tránsfuga, siempre se ha dado el vuelco a la situación anterior, y siempre alguien de los nuevos gestores municipales ha tenido la desfachatez de pronunciar la cínica frase de….. “Lo hacemos por el bien de los……….” (póngase el gentilicio de los habitantes de la localidad que cada uno de nosotros conocemos en la que así todos han actuado), frase que con el tiempo se ha demostrado cambiante, ya que el único bien derivado de los pactos con transfugas ha sido el engrose de los patrimonios de quienes la pronunciaron tratando de justificar lo injustificable.
Y es que cuando se abandonan los principios del socialismo y se abrazan los del progresismo ladrillero pasa lo que pasa.
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