Solo cuatro concretos aspectos me han llegado, y al parecer son los únicos que han dado color a la reunión del Comité Federal del Psoe que, celebrado el sábado pasado, reunió a los cardenales del progresismo zapateriano.
Nada trataron los príncipes del Psoe respecto a divergencias internas en relación a la reforma de las condiciones de trabajo y despido de los trabajadores. Nada respecto a incrementos fiscales para los que más tienen contempladas en el proyecto de presupuestos para el año que viene. Nada respecto a la reforma-rebaja de las pensiones. Nada sobre formulas para incrementar el número de trabajadores ocupados y con contratos decentes. Nada sobre recortes en el gasto público destinado a subvenciones y regalos fiscales a empresas, bancos, cajas o a la iglesia católica. Nada sobre recortes del dinero público destinado a los partidos políticos.
Pero he de reconocer que todo lo anterior son fruslerías ante la cruentísima guerra que Tomas Gómez ha desatado al preguntar si Zp, sí, o Zp no, se presentará en el 2012, ya que como le dijeron, ahora eso no toca.
En ese mismo sentido, que Zp en un profundísimo análisis expusiese que con los cambios de fichas, perdón, de ministros, ha acertado, y que la prueba del algodón son largas caras de los peperos que así evidencian su tino, pone de manifiesto la capacidad, la finura y la sutileza del líder, ya que para él, lo de Lampedusa, -cambiar algo para que todo siga igual-, como todos sabemos, es algo demodé. Es por eso que cambiar a Moratinos por la Trini es de lo más guay que a los trabajadores nos puede pasar; cambiar a la Trini por la Pajin es la solución automática a las listas de espera de las 17 sanidades autonómicas y mandar a la vice-fashion a aconsejar al estado es, igualmente, lo que todos los ciudadanos de esta confederación española esperábamos como agua de la Moncloa.
Se ocupó también el máximo conclave progresista en ratificar listas municipales de ciudades de más de cincuenta mil habitantes, lográndose el histórico hito, referencia inmutable para las generaciones venideras, y ejemplo de limpieza y coherencia política, de respaldar a un expulsado-tránsfuga-independiente que merece todo su respeto político, el actual alcalde de Benidorm.
Por último manifestaron su determinación de convocar a un sínodo de obispos autonómicos para explicarles lo que tienen que explicar a sus feligreses. Porque el problema que dicen tener es que hasta ahora no se han explicado bien, y claro, no les hemos entendido, pero a partir de ahora vamos enterarnos de una vez por todas que la reforma laboral, bien explicada, genera empleo, subidas salariales, más vacaciones y rebajas fiscales para los trabajadores. Igualmente descubriremos que la futura rebaja de las pensiones es lo más indicado para el medio ambiente, ya que los ancianos, con nuestra incontinencia, consumimos muchos pañales, y la celulosa , al fin y al cabo, son árboles talados, así que… a aprovechar las toallas viejas como hace cincuenta años y a cooperar a que la capa de ozono se recupere.
Lo que dice González, que cuando está contra la pared, se le despiertan las neuronas. Pues menos mal.
Nada trataron los príncipes del Psoe respecto a divergencias internas en relación a la reforma de las condiciones de trabajo y despido de los trabajadores. Nada respecto a incrementos fiscales para los que más tienen contempladas en el proyecto de presupuestos para el año que viene. Nada respecto a la reforma-rebaja de las pensiones. Nada sobre formulas para incrementar el número de trabajadores ocupados y con contratos decentes. Nada sobre recortes en el gasto público destinado a subvenciones y regalos fiscales a empresas, bancos, cajas o a la iglesia católica. Nada sobre recortes del dinero público destinado a los partidos políticos.
Pero he de reconocer que todo lo anterior son fruslerías ante la cruentísima guerra que Tomas Gómez ha desatado al preguntar si Zp, sí, o Zp no, se presentará en el 2012, ya que como le dijeron, ahora eso no toca.
En ese mismo sentido, que Zp en un profundísimo análisis expusiese que con los cambios de fichas, perdón, de ministros, ha acertado, y que la prueba del algodón son largas caras de los peperos que así evidencian su tino, pone de manifiesto la capacidad, la finura y la sutileza del líder, ya que para él, lo de Lampedusa, -cambiar algo para que todo siga igual-, como todos sabemos, es algo demodé. Es por eso que cambiar a Moratinos por la Trini es de lo más guay que a los trabajadores nos puede pasar; cambiar a la Trini por la Pajin es la solución automática a las listas de espera de las 17 sanidades autonómicas y mandar a la vice-fashion a aconsejar al estado es, igualmente, lo que todos los ciudadanos de esta confederación española esperábamos como agua de la Moncloa.
Se ocupó también el máximo conclave progresista en ratificar listas municipales de ciudades de más de cincuenta mil habitantes, lográndose el histórico hito, referencia inmutable para las generaciones venideras, y ejemplo de limpieza y coherencia política, de respaldar a un expulsado-tránsfuga-independiente que merece todo su respeto político, el actual alcalde de Benidorm.
Por último manifestaron su determinación de convocar a un sínodo de obispos autonómicos para explicarles lo que tienen que explicar a sus feligreses. Porque el problema que dicen tener es que hasta ahora no se han explicado bien, y claro, no les hemos entendido, pero a partir de ahora vamos enterarnos de una vez por todas que la reforma laboral, bien explicada, genera empleo, subidas salariales, más vacaciones y rebajas fiscales para los trabajadores. Igualmente descubriremos que la futura rebaja de las pensiones es lo más indicado para el medio ambiente, ya que los ancianos, con nuestra incontinencia, consumimos muchos pañales, y la celulosa , al fin y al cabo, son árboles talados, así que… a aprovechar las toallas viejas como hace cincuenta años y a cooperar a que la capa de ozono se recupere.
Lo que dice González, que cuando está contra la pared, se le despiertan las neuronas. Pues menos mal.
2 comentarios:
Lo de la Trini creo que sobra
Estoy de acuerdo. Creo que la Trini sobra.
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