NOTA DOMINGUERA

Con tres millones y pico de parados y el Corbacho asegurando que no llegaran a cuatro, lo cual no hace más que certificar que para finales de año los tendremos, con la producción industrial por los suelos, -jamás había habido un desplome del 16 %-, con la actividad económica y financiera en clara recesión, con unos agentes sociales que solo se representan a sí mismos y a sus cuentas corrientes, y con un Estado que genera déficit y desigualdad sin que los servicios públicos ni mejoren, ni se incrementen, dicen que don Zp, el más directo responsable de tal desastre, está deprimido.

Pues yo, no me lo creo.
Para estar deprimido, afectado negativamente por una situación como la que los datos y hechos reseñados dibujan, hay que tener una mínima sensibilidad, un mínimo sentido de la solidaridad y de la responsabilidad, y puesto que en todo el devenir personal y político de Zp solo ha habido frio calculo a favor de su exclusivo interés, ansias de poder, acomodación a los intereses de los poderosos, mentiras y falsedades, no es creíble que, cuando los lógicos resultados de su acción política se acumulan, pueda sentirse sorprendido, y por ello deprimido o agobiado.

Tan solo acepto como posible que pudiera estarlo al comprobar que su intención, hasta ahora triunfante, de engañar a todos durante todo el tiempo, se esté viniendo abajo. Amén.