A pesar de que la ocurrencia zapateril me va a costar 166 euros al mes, celebro por varias razones que se haya aprobado el decreto del tijeretazo.En primer lugar porque a partir de este instante yo mismo y el resto de los trabajadores del sector público español estamos más legitimados que ningún otro individuo o colectivo para exigir la participación en el esfuerzo económico necesario para salir de la crisis a los que históricamente ni tan siquiera cooperan anualmente en los ingresos fiscales del estado.
Celebro que se haya aprobado el decretazo pues este se suma a todo un conjunto de medidas tan antisociales como favorecedoras de los plutócratas que desde este gobierno de negociantes vienen tomando desde el día 14 de marzo de 2004, resaltando aun más la identidad antisocialista de los que se denominan progresistas.
Celebro que se haya aprobado el decretazo mas antisocial de la democracia sin un solo voto a favor de cualquiera de las restantes fuerzas políticas del Congreso, lo cual pone de relieve la soledad política del zapaterismo.
Celebro que se haya aprobado este decreto en la forma en que se ha hecho, ya que esta manifiesta de forma inequívoca la incongruencia de la más recalcitrante de las derechas europeas, la cual, a diferencia de la derecha portuguesa o griega, pone al frente de sus intereses el cuanto peor, mejor.
En sentido contrario lamento la aprobación del decreto de los recortes ya que como aquí he expuesto hace unos días, la cuantía de los recortes no resuelve ni de lejos las necesidades de reducción de los déficits presupuestarios ni, por lo tanto, favorecerá la colocación de las sucesivas emisiones de deuda pública que tienen previsto realizar los chicos, de la Salgado y de Mafo.
Por lo anterior, me temo, que en su momento, con “agostidad” y alevosía, se reforme la tabla de retenciones a cuenta del IRPF, y que en la elaboración de los presupuestos generales para 2011 los tipos fiscales a aplicar a los diferentes tramos impositivos suban lo que aun no está escrito.
Por último reseñar unos matices que en el barullo del tijeretazo zapateril parece que están pasando desapercibidos.
Primero: Admito apuestas sobre cuando, como y cuanto van a “exprimir” fiscalmente a los que mas tienen.
Segundo: no sé si alguien ha oído algo sobre la duración de los recortes salariales, sobre la duración de la congelación de las pensiones, si alguien sabe durante cuanto tiempo se aplicará la limitación del pago por retroactividad en la gestión de las prestaciones derivadas de la Ley de Dependencia y cuanto tiempo se van a seguir reduciendo las ayudas a los países más pobres del mundo. Porque lo que ya si sabemos es que el “terrible” impuesto que les van a aplicar a los que mas tienen será temporal.
Todo lo anterior me recuerda, con una pequeña diferencia, la actitud de los pilotos kamikazes japoneses que, a pesar de saber perdida la guerra, se lanzaban en picado contra los barcos enemigos. Estos zapateristas, a semejanza de los suicidas japoneses, hoy, en bloque, sin disidencia alguna, se han lanzado a pie pero con la carga explosiva del decretazo, en contra de su propio barco, y seguros han de estar en que no tardará en hundirse.
Mientras, los progresistas tocan el violín en las cubiertas de las paginas web del PSOE sin, al parecer, importarles la marea negra, (¿de camisas?), que se adivina en el horizonte.
1 comentario:
Las derechas cristianas españolas del P.P. han demostrado que se cachondean de sus propios votantes. Los toman por idiotas. Se pasan meses pidiendo unas medidas y cuando se aplican las rechazan. De pena.
No es sólo que las medidas antidéficit sean insuficientes. Es que además pueden ser muy contraproducentes. Si el déficit se mide, además de en valor absoluto en euros, en valor relativo como porcentaje sobre el P.I.B., y si estas medidas van a reducir el P.I.B., el resultado es que el déficit expresado como porcentaje sobre el P.I.B. crecerá y no disminuirá.
El conjunto formado por:
a) indefinición en el concepto, cantidad, momento de entrada en vigor
b) temporalidad
de las medidas fiscales "anunciadas" —si es que con a) y b) podemos usar esa palabra— destinadas a la progresividad fiscal, esto es, para actuar sobre ese 30% superior de renta —que pertenece a mucho menos del 30% de la población— de una forma parecida a como debía de haberse actuado desde hace unos 20 años, es tremendamente peligroso. Es puro humo, si me piden que apueste.
Aquí, los propietarios del 30% superior de las rentas y riqueza se niegan a contribuir a las arcas públicas españolas y los demás se lo permitimos en una mezcla de ignorancia, despreocupación o confianza ciega. No se ha cambiado el chip, no nos hemos enterado de que estamos en Democracia y que aquí no sólo se puede sinó que se debe hacer exigencia de rendimiento de cuentas a nuestros gestores y delegados públicos.
No embargamos a esos súper ricos insolidarios, no les exiliamos... ¡les legislamos ad-hoc para que esten bien cómodos! Y encima si se razona en voz alta que eso no es ni socialista ni obrero —en realidad tampoco es liberal ni siquiera demócrata— entonces te dicen "antipatriota". Muy fuerte.
Precisamente debe ser duro para alguien que, como vd., expone que desea un P.S.O.E. respetuoso con su Historia el que se haya dinamitado prácticamente por completo a esta organización política como partido de izquierdas. Olof Palme y Allende quedan muy lejos... Mucho Tony Blair, por desgracia, es lo que el ciudadano percibe en estos años.
No sé si será posible una regeneración. A alguien apartidista, instrumentalista e infiel en cuanto a organizaciones como yo, en cierto modo le puede dar igual. Pero debe ser más duro para quienes entienden y sienten que les han usurpado y pervertido una organización querida.
Si la gente no reacciona con contundencia en las urnas (y en la militancia) de modo que la cúpula actual comprenda unívocamente que no se toleran estas actuaciones, no creo que pueda salvarse tal partido como fuerza política de izquierdas.
No sé si suena muy pesimista.
Cordialmente,
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