EN SU BABIA (Ferraz 70)

Nos obsequia el periódico de los neosocialistas, el del gorrino pirata, con una “casual” cadena de análisis informativos sobre los inicios de los líos que los resultados electorales habidos en determinadas regiones y en unas cuantas provincias, traen consigo.
Sería de agradecer este esfuerzo informativo si no fuese porque está perfectamente dirigido y coordinado desde Ferraz. Es tan evidente, que hasta es insultante.
Se entra, por separado, a desmenuzar y después a justificar, la necesidad de la intervención del poder central del Psoe en Valencia, en Murcia, en Madrid y puntualmente en Málaga y en Almería, y lo primero sobre lo que hay que interrogarse de esta manipulación es las razones por las que han excluido otras zonas o regiones en las que los resultados han sido tan negativos como en las analizadas. Extraña que los resultados de Cádiz, de Huelva, de Granada, y en conjunto de toda Andalucía, de toda Castilla- La Mancha y de Castilla-León ni tan siquiera se contemplen como merecedores de acompañar en el análisis a las regiones o provincias que en Ferraz deben haber determinado que van a ser objeto de zapaterista purga.
Hay que cargarse al “lermismo” dicen que dicen en Valencia. ¡Pero si a Lerma le puso Zp y Pepiño tras la ejecución de Pla! Se quiere que todos olvidemos que las cabeceras de las listas de las tres provincias valencianas las han ocupado desde la Vice, de la Pega, al “ex”, Sevilla, pasando por el recién pescado ministro Bernat Soria, y alguna responsabilidad le corresponderá a quien digitalmente les colocó.
En Murcia no hay nada que hacer, dicen. La corrupción urbanística parece que es respaldada por la gente, repiten. Pues si así fuese, parece que hay algún que otro municipio que con alcalde del Psoe debiera, según esta afirmación, mejorar sus resultados. Y de igual forma que en Valencia, sin argumentos sólidos, derivados de análisis serio y sensato, y lo que es peor, sin más idea que la de también aquí purgar a todo lo que no sea “propio”, se lanzarán a vender renovación, cuando lo que quieren decir es sumisión y vacio.
Lo de Almería y Málaga es de nota. Resulta que en el conjunto de Andalucía se descienden cantidades que empiezan a ser significativas mientras que el PP sube de forma impresionante, hasta el punto de correr el serio peligro, la certeza quizás, de perder las próximas elecciones autonómicas y generales si la tendencia actual se mantuviese, -el Psoe ha perdido 55000 votos y el PP ha ganado 198000-, y ellos, el periódico y los chicos de Ferraz, también de forma casual, enfocan solo el problema en Almería y Málaga. Y es que quieren, también, que nos olvidemos de los fracasos electorales habidos en Cádiz, en Huelva, en Granada, en Córdoba y, menores, pero siempre con descensos, en Sevilla y Jaén. Al igual que quieren que nos olvidemos de sus “paracaidistas” que también aquí, pero en menor número que en Valencia, se han llevado el mismo chasco.
Si a lo de Andalucía no se le pone rápido y drástico remedio, y para mi ese remedio pasa por “renovar” a los “arácnidos” que en plan siciliano tratan de mantener cautivos a quienes antes o después se aliarán con nacientes “espartaquistas”, si la transparencia, la limpieza, la verdad y el buen hacer desde la administración pública no se recuperan, le pasará, a esta llamada izquierda, lo que ya le pasó en Valencia y Madrid, el descredito aumentará, con él, el rechazo y con este la profundización del desastre electoral. Al tiempo.
Dejo Madrid para el final ya que no por ser territorio más reducido es menos importante. Por población y por historia, Madrid es electoralmente determinante. Así ha venido siendo y así seguirá. Y seguirá con la misma tendencia, ya que, me temo, las mismas cataplasmas se van a aplicar.
Unos números. Mientras que en Andalucía se han perdido 55000 votos con un censo de 6,1 millones de electores, en Madrid se han perdido 167000 votos con un censo de 4,3 millones de electores, por contra, el PP ha ganado 147000 votos. Esto demuestra la gravedad de la situación política del Psoe en Madrid región y en cada uno de la casi totalidad de los municipios de la región.
En Madrid ciudad el PP saca 12,5 puntos porcentuales al Psoe. En el mal llamado cinturón sur que ya de rojo tiene poco, como mucho rosáceo, el PP ha crecido hasta el punto de poner en serio riesgo la continuidad de corporaciones socialistas si la tendencia se mantuviese. Y en la corona que va del sureste al oeste pasando por el norte, el dominio del PP es aplastante. Y todo esto cuando quien ha encabezado la lista por Madrid ha sido un tal Rodríguez.
Pasados los primeros días al calor del triunfo y llegados al punto de ver detenidamente que ha pasado, hay que concluir que en Madrid, se diga cómo se diga, la farmacia Zapatero no ha encontrado remedios para el mal del Psm, y que mirando hacia lo venidero, es de temer que los remedios que pretenden aplicar, de nuevo “manu militari”, contengan la misma fórmula magistral.
Ni antaño era Simancas el origen de todos los males, ganó con las siglas FSM unas elecciones que los pepiñeros Tamayo y Sáez le robaron, ni hoy, el aguado Tomas, es incoloro, inodoro e insípido, puede ser solución alguna a los problemas que unos y otros causan.
Tiene Madrid una identidad que parecen haber olvidado, o a lo peor, es que ni se han percatado que Madrid, con todos los respetos, no es Lugo. Madrid es la sociedad regional, si es que esto es una región, que esa es otra, más activa, más productiva, que más ha crecido en los últimos años, sus habitantes poseen un índice de conocimientos e información por encima de la media española, y por todo ello, con lo que de bueno y malo tiene lo anterior, es la sociedad más exigente y que con más rigor analiza dichos y hechos, tanto de unos, como de otros.
Pues ante esta realidad, los alquimistas de Ferraz, en aquelarre tan mantenido en el tiempo como estúpido, por fracasado, repiten una y otra vez junto a sus parroquianos, que hay que renovar al Psm. ¡Pero, "so" acemilas, si lo acabáis de renovar hace diez meses, y no ha funcionado, como más de uno advertimos entonces! Pues....como si nada. Ahora otra vez a pensar si el Tomas si, o el Tomas no. Si damos marcha atrás y le largamos, o lo mantenemos y no lo enmendamos.

¡Y la piedra filosofal sin aparecer!
Al final…que más da. Estos morirán sin enterarse que lo que hay que dar a los madrileños es identidad acorde con lo que se dice ser. Y para los madrileños el Psoe ha sido, es y ha de seguir siendo el partido de la izquierda socialdemócrata española, el partido que ha de decir lo mismo en Baracaldo que en Manresa, en Ecija que en Santiago, en Paterna que en Navacerrada.

Y como en el día a día los madrileños comprueban que es enorme la distancia entre el dicho, su dicho, y el hecho, su hecho, la desafección suma y sigue; pero ni por esas. Y puesto que de eso se trata, de seguir en el momio, ellos siguen en su Babia, mareando la perdiz, tan ricamente.
Cuando sea necesario sacarán a pasear el “¡que viene la derecha!” y las ovejitas, corriendo al redil. Hasta que venga de verdad, y se coma a las pocas que queden.