viernes, 7 de marzo de 2008

POCAS PALABRAS

Hoy sobran casi todas las palabras que no esten dirigidas a condenar a esos cobardes asesinos que ni abertzales ni de izquierda son, son escoria mafiosa y carne de carcel.
Pero hay en el extremo opuesto, y ya se sabe que se tocan, otros potenciales asesinos que en el griterio de otro supuesto patriotismo, no solo no condenan, sino que ni disimulan su contento por la muerte de este socialista.
A los de las pistolas mi demanda de castigo. A los fascistas que lloran a los suyos y casi aplauden a los que no lo son, mi desprecio. Ambos comparten el mismo sitio en la historia de la humanidad, un mismo cubo de basura.

No hay comentarios: