EL PSOE Y EL "MADRIZ"; FOBIAS MERECIDAS.

Queridos lectores, les pido perdón por anticipado pero es que no puedo resistirme a la comparación político-futbolera. Y es que para mí lo de Zp es como lo de Mouriño pero en tonto de baba. Veamos.
Mouriño, al igual que Zp, fichó por uno de los ladrilleros más potentes del mercado, el primero por Perez y el segundo por Rivero. Ambos han tenido libertad para hacer una plantilla de jugadores a su gusto, la diferencia tonta es que Zp ficho a la Bibi, a la Pajin, y al Sebastián, mientras Mouriño fichó a Carballo, Ozïl y Cristiano, que digo yo que hay una diferencia, aunque en las comisiones recibidas haya paridad.
De otro lado el Mouriño, chulo donde los haya, se puso desde el primer momento al madridismo por montera atacando a los culés, que es lo que su “electorado” mas ama, tocarles “ells cullons” a los de la Masía. Por el contrario, Zp se amarteló con los del ladrillo y los banqueros creyéndose que su hinchada pasaba de con quien se encamaba, y que lo que le importaba era si adelantábamos a Italia o a Francia en PIB per cápita. Y era que no.
Mouriño, ya antes de la mitad de la temporada, comprobó, en sus carnes y en las de sus “mais bravos guerreiros que o mondo contempló”, que el enemigo era mucho enemigo, -manita incluida-, y limitó sus pretensiones a ganarles algo, aunque fuese la copa del Borbón, que como todos sabemos es el culmen de los trofeos balompedicos. Por su parte Zp, mediada la legislatura acepto que la crisis era crisis del copón y sin jugar partido alguno, pues ni se presentó a jugar la competición contra los banqueros nacionales y extranjeros, se rindió al capital con bobos y bagajes, y encima intentó hacer creer a su menguante hinchada que él sabía lo que se estaba haciendo y que no había otra salida.
A punto de finalizar la temporada, a los del balón ladrillero-fachasfondosur, les tocó nada más y nada menos que jugar cuatro partidos seguidos contra los que ellos llaman los polacos, contra los mismos a los que exigen, así por las buenas, que tras ofenderlos sean la misma España que ellos. Les cayeron dos derrotas una de las cuales era de las que duelen ya que fue en esa competición que siguen diciendo que es propiedad del Madrid y minoritariamente de algún otro, la copa de Europa, ahora llamada Champions League que para eso en Chamartin dicen que hasta Sergio Ramos chapurrea el “inglis”. Ante esto Mouriño recogió velas, orientó su batalla contra Valdano y en el actual silencio de su boca ha quedado resonando aquello de ¿Pur quéee?
Su reverso idiotizado, el de la Moncloa, a punto de finalizar la legislatura y con un solo partido por disputar, prácticamente no ha salido a jugarlo, es más, ha habido centrocampistas como Barreda que se han negado a formar parte del banquillo. Huelga recordar la goleada encajada en campo propio ya que aun osan recordar que el municipalismo es la célula política originaria del socialismo. Días antes del hundimiento solo se le ocurrió al “líder” anunciar su renuncia a seguir, intentando paliar la anunciada muerte electoral, -por supuesto que sin conseguirlo-, y a los escasos días de la debacle en otro volatín, pro domo sua, mata a su protegida y digitaliza como cambio novedoso al segundo más antiguo de la nomina zapaterista, Rubalcaba, que es como si Mouriño vistiese de corto a don Alfredo D´Stefano y le pusiese a correr la banda del Bernabéu para así desbordar a Dani Alves.
Y es que con este tipo de personal no se puede ir a ningún sitio. El uno, por chulo, ha conseguido en un solo año que la animadversión contra el Real Madrid se vuelva gigantesca, cuando hasta la llegada del ser galáctico y de este su extraterrestre dictadorzuelo, el Madrid era un club que tenía el respeto de todos como entidad y la simpatía de los aficionados al futbol por su saber estar y su elegancia en el ganar y en el perder. Hoy, el del ladrillo y el de los chicles han conseguido que en todos los campos su equipo sea recibido con la inquina y el desprecio que merecen quienes van por la vida ganando con billetes cuando no saben hacerlo con deportividad y con elegancia.
El otro, el zombi de la Moncloa, pretende seguir siendo secretario general del Psoe y facilitar la remontada cuando hasta ahora solo ha sabido decir que no ha sabido explicarse, cuando ha insultado a todos los bellacos que hemos comprobado y dicho que ha practicado tantos recortes en los derechos y bolsillos de los trabajadores como regalos ha practicado hacia los que más tienen, esos a los que, mintiendo, se refería cuando dijo que no consentiría que la crisis la pagasen los que no la habían provocado.
Estas son en esencia y muy resumidas las causas que a mi entender han hundido en el rechazo al Madrid y al Psoe, y estas son unas pocas de las razones por las cuales ni uno ni otro conseguirán deshacerse de las fobias que provocan hasta que uno y otro pasen radical y explícitamente las pagina de chulería, de prepotencia y de desprecio a los que con ellos no comulgan de su desvarío histórico.
De ahí que a los que nos gusta el futbol estemos con el que hace el Barça y que los que somos de izquierda reclamemos otro Psoe sin zapaterismo alguno.