miércoles, 4 de marzo de 2009

SOSPECHOSA COINCIDENCIA

Cuando la derecha de siempre y la derecha de ahora, junto a los medios siempre de derechas y los medios que se dicen independientes,-y lo son, solo de la izquierda-, todos sus próceres y todos sus analistas coinciden en una concreta visión política, a mi, la mosca se me pega a la oreja y aquello de “lagarto, lagarto”, como el desodorante, no me abandona.
Decía hace unos días que el más fuerte y valioso criterio que en democracia se ha de tener en cuenta es el voto de los ciudadanos, obviedad que nadie de los antes citados discute, pero todos a partir de ese punto establecen un terreno de juego tan contrario a ese obvio principio que lo destruyen y anulan.
Todos dicen que no siendo este un régimen presidencialista los ciudadanos no eligen ni a alcaldes ni a presidentes, que son los electos, en el uso legítimo de las matemáticas electorales, los que realmente eligen a esos cargos, callando que con el juego de esas matemáticas electorales pueden relegar y de hecho relegan no solo el anterior principio tan alabado como olvidado, sino que relegan y desprecian lo implícito que todo voto ciudadano lleva consigo, el respaldo que ese ciudadano en concreto y el conjunto de ellos globalmente prestan a tal o cual oferta política, a tal o cual programa de acción política que, falsamente, todos dicen habrían de ser contratos de obligado cumplimiento para los elegidos. Con tal proceder, estos, y sus voceros, mantienen que el voto ciudadano es tan superficial y desconocedor de los programas electorales que, guiado solo por superficiales simpatías personales, merece ser despreciado una vez contabilizado.
Es cierto que España lleva un corto periodo de práctica política y que por ello el poso cultural político del conjunto de la ciudadanía puede ser mejorable si se compara con otros países mas duchos en tales practicas, pero no por ello se puede saltar de la ortodoxia y corrección política de reconocer como tesoro democrático al voto ciudadano libremente ejercido al interesado precipicio político por el cual la mecánica practicada para la formación de gobiernos de cualquier nivel lo desprecie y anule.
Se ha llegado al punto en el que habiendo atosigado tanto a la población con esa prédica y esa práctica, se ha acabado por aceptar como normal, por frecuente, que una corrupción política de tan alto nivel socave el mayor fundamento de una democracia.
Hoy, desde algún que otro disidente Zapaterista, a los mas conspicuos peperos, pasando por los mas descerebrados cancerberos de uno y otro lado y hasta aquellos, pocos, que en multitud de ocasiones mantienen recto criterio, y lo que es mas importante, coherencia con él, todos, coinciden en que hay razones políticas para echar al PNV del gobierno de Euskadi, sin querer considerar que tal desalojo obligue a mezclar churras con merinas, a pastelear hasta lo irreconocible los programas propios y provocando que la estabilidad, la en otras ocasiones cacareada estabilidad, hoy sea, también, arrinconada, olvidada y despreciada.
Hoy, no encuentro a quien se pregunte qué razones democráticas son las que soportan la necesidad de desalojar al PNV violando, paradójicamente, fundamentos democráticos. Hablan de tres décadas de gobierno del PNV, las mismas que las del PSOE en Andalucía. Hablan de red clientelar del PNV, red que por extensión y población ha de ser un simple alevín al lado de la que nutre al PSOE también en Andalucía. Hablan de la necesidad de airear con nuevas formas y caras el gobierno y a la sociedad vasca, y hay que preguntarse ¿por qué no ventilan partidos políticos y gobiernos locales y autonómicos tan enquistados en el poder como lo está el PNV en Euskadi de forma que la sociedad española conozca realmente los intereses corporativos de los partidos políticos, de sus soportes mediáticos y de las correspondientes 17 redes clientelares? ¿Por qué este conspicuo juntaletras no conoce denuncia alguna sobre acciones presuntamente delictivas o simplemente prevaricadoras del denostado gobierno del PNV? ¿Por qué los que quieren aire fresco en Euskadi, no abren ventanas en Madrid, en Valencia, en Andalucía, o en las dos Castillas?
De nuevo el fariseísmo político les delata ya que si hubiesen predicado con el ejemplo otra muy distinta sería hoy su posición, su práctica y sus exigencias y justificaciones.
Todos han consentido con la degeneración política y social que ahora denuncian como aparentemente exclusiva del PNV, todos los que en un grado u otro la practican. Por ello no están legitimados para exigir autos sacramentales a nadie, ellos, que ni una sola vez han hecho la más mínima autocrítica.
De aquí mi certidumbre sobre lo que afirmo. No están legitimados para “interpretar” el mandato ciudadano.
Lo que está sucediendo en Euskadi es un paso muy serio hacia el estrangulamiento de la democracia. No hay, no puede haber razones que atropellen a la mas alta razón democrática, la voz del pueblo, esta no puede tener interpretes que la manipulen y a la postre desprecien y anulen en pro de unos supuestos beneficios que solo a los involucrados en esa corrupción favorecen.
Es evidente que estoy solo en esta posición, pero para nada deseo compañía que a los restos de democracia que en España van quedando les quiten el único cimiento que la sostiene, el valor de la palabra colectiva de sus ciudadanos.
Soy consciente de estar cuestionando otro pilar del sistema, la legitimidad de los electos como representantes de los intereses de la ciudadanía, pero cuando esos representantes transmutan y cambian los intereses ciudadanos por los intereses de los ciudadanos que nos representan, son ellos, no yo, quienes dinamitan tal legitimidad.
Sin ánimo de emulación, hay que retomar a Unamuno, vasco en Salamanca, que a Millán Astray espetó “tendréis la razón de la fuerza, pero no la fuerza de la razón”.
Y si estoy equivocado que me lo demuestren.

1 comentario:

CSA dijo...

El problema ahora es ver con quien se negocia...

O se traga un gobierno del PNV con otro frente nacionalista o se admite a un PSOE con un PP y UPYD dandole la espalda con un frente constitucionalista...

ya veremos lo que sucede.

Tienes un buen blog por lo que veo, a ver si te visito más veces.